Gálvez afronta su etapa como delegada de la Junta 'con compromiso, ilusión y responsabilidad'
La nueva delegada del Gobierno andaluz en Jaén, Purificación Gálvez, ha destacado el carácter de 'servidora pública' que ha guiado su trayectoria profesional y que mantendrá al frente de la Junta en la provincia en una etapa que afronta 'con compromiso e ilusión'.
En una comparecencia ante los medios tras hacerse oficial este martes su nombramiento y acompañada de su antecesor, Felipe López, y de su sucesora en la Delegación de Salud, Josefa García Blanco, Gálvez ha querido trasladar a los jiennenses que sus "puertas están abiertas". "Estoy cargada de responsabilidad, como no podría ser de otra manera, pero no voy a escatimar esfuerzos para llevar a cabo y poder hacer operativas las políticas de la Junta coordinando los diferentes departamentos en la provincia", ha manifestado.
Entre ellas, ha aludido a las políticas sociales, con la educación, la sanidad y la Ley de Dependencia, que siguen siendo una prioridad para la Junta, así como la línea emprendida para estimular a las empresas y la inversión privada que fomente la generación de riqueza y empleo con el objetivo de salir de la crisis cuanto antes, según ha incidido.
Asimismo, ha subrayado su intención de trabajar "muy directamente con los ayuntamientos fortaleciendo el municipalismo" para que puedan aplicarse las dos nuevas leyes de ámbito local que pretenden potenciar la autogestión de esta administración. Además, entre las cuestiones concretas que deberá abordar a partir de ahora, ha citado la situación de los extrabajadores de Primayor, a los que ha expresado la "preocupación" de la Junta por dar una respuesta. "Se está haciendo, en ningún momento se ha bajado la guardia y vamos a seguir buscando soluciones", ha apostillado.
Por otro lado, preguntada por si se siente respaldada por el Gobierno andaluz y por el PSOE en este nuevo cargo, Gálvez ha asegurado que sí, añadiendo que va a trabajar "para el Gobierno y para el partido al que represento" y ejerce la labor ejecutiva. Además, no ha querido entrar a valorar la tardanza en su nombramiento --este cargo en Jaén ha sido el último en renovarse entre los delegados provinciales o directores generales que han abandonado sus puestos en Andalucía al concurrir en las elecciones generales--, de modo que se ha limitado a apuntar que "estas cuestiones no son fáciles de explicar" y que se trata de un puesto que "requiere una madurez" que ella afronta con las mejores de sus voluntades.