Francisco Ferrer Lerín: “Nace de una foto y una anécdota de 30 amigas”

—¿Qué encontrarán los lectores entre las páginas de 30 niñas?  
—Es un libro de cuentos que recopila las historias de treinta amigas. A ellas les pedí una fotografía de infancia y una anécdota de esta época y a partir de eso he construido una historia.

—¿Entonces tienen algo de biográfico estos cuentos?  
—Los escritores siempre tergiversamos las historias reales. Aquí la base  son las anécdotas, a partir de las que invento, por lo que tiene poco de realidad biográfica.

—¿Y cómo fue acogido el resultado por sus protagonistas?  
—En general, favorable. Solo una se puso un poco nerviosa. Son treinta personas de mi total confianza y no ha habido problema.

—Las protagonistas tienen un protagonismo especial en las presentaciones. ¿No es así?  
—Ya lo hice en Valencia. Las niñas, las llamo así aunque ya no lo son, leen sus cuentos durante la presentación. Esta tarde en La Económica, estarán las niñas jiennenses y leerán sus cuentos, lo que no deja que también repasemos otras de las historias.

—¿Qué lugar ocupa este libro en su producción literaria? ¿Es la primera vez que se enfrenta a publicar cuentos?  
—Fundamentalmente, he escrito poesía y narrativa, por lo que estos cuentos son un capítulo totalmente aparte. De hecho, 30 niñas surge de una colaboración con unos amigos de Valencia que han creado una editorial nueva y escribí este libro como apoyo a este proyecto editorial en un momento en el que el sector lo tiene difícil.

—¿Cómo se llama la editorial?  
—Leteradura. Es un homenaje a una librería mítica de Barcelona de los años 60, 70 y 80, en el Paseo de Gracia. Desapareció y el título es un recuerdo a esos centros de cultura que son las librerías.

—Las librerías tradicionales son centros de cultura en extinción.   
—Es lamentable. Soy barcelonés y cada vez que vuelvo ya no existen la mayoría de los cines a los que iba, e igual con las librerías, que están desapareciendo.

—¿Cómo llega un barcelonés afincado en Jaca a Jaén para presentar su libro?  
—Estuve tres años viviendo en Torredonjimeno, de donde es mi mujer, por lo que tengo muchos amigos y familia. Mi tesis doctoral también la preparé aquí. Además, Jaén  es un escenario natural que me fascina.

—Los escritores, aunque tengan un título recién salido de la imprenta, siempre tienen proyectos editoriales nuevos entre manos. ¿Cuáles son los suyos?
—Ahora mismo estoy terminando una novela para la editorial Tusquets, que tengo muy avanzada. Al tiempo también tengo delante un libro de poemas, que se llamará La edad del insecto, que se publicará el año que viene también con una editorial barcelonesa que se llama Malpaso.