Francia y Alemania ultiman su propuesta para reformar los tratados de la UE

El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, y la canciller de  Alemania, Angela Merkel, presentarán 'en los próximos días' su  propuesta para reformar los tratados de la Unión Europea (UE), en la  que no se incluiría una posible reforma del Banco Central Europeo, a  quien se han comprometido a no realizar ninguna petición.

    24 nov 2011 / 17:12 H.

    En una rueda de prensa junto al primer ministro italiano, Mario  Monti, Merkel y Sarkozy incidieron en la "independencia" de la  institución presidida por Mario Draghi y subrayaron que las  modificaciones de los tratados tienen como objetivo avanzar hacia una  colaboración más profunda en materia política y hacia una mayor unión  fiscal. El presidente francés expresó en nombre de los tres mandatarios  todo su confianza en el BCE y en sus responsables y mostró su respeto  a la independencia de esta "institución esencial". Por este motivo,  recalcó que evitarían hacer cualquier tipo de solicitud positiva o  negativa al banco central.  En esta misma línea, la canciller alemana incidió en la  independencia de esta institución y, por ello, aseguró que una  modificación eventual del tratado no afectaría al órgano encargado de  la política monetaria.  Respecto a la reforma de los tratados, Sarkozy apuntó que se está  trabajando para presentar "en los próximos días", antes del Consejo  Europeo del 9 de diciembre, una serie de propuestas que tiene como el  objetivo de recuperar la confianza y evitar que vuelva a ocurrir lo  que está viviendo actualmente Europa.  Por su parte, Merkel incidió en que lo primero es dar pasos para  avanzar hacia una mayor unión fiscal, por ejemplo reforzando el Pacto  de Estabilidad y Crecimiento para que pueda imponer sanciones  automáticas, así como implementar los acuerdos adoptados el 26 de  octubre, pero matizó que estas mejoras no le llevarán a cambiar de  postura sobre el BCE o los eurobonos.  En este sentido, la canciller alemana subrayó que se realizará una  propuesta para que exista una cooperación política "más estrecha"  para devolver la confianza en la política europea.  En esta misma línea, Monti defendió que esa mayor unidad fiscal es  necesaria para dar más estabilidad a la zona euro, aunque añadió  también que cada país tiene que hacer sus deberes en su propia casa. Acerca de las diferencias de opiniones con la canciller alemana,  Sarkozy aseguró que ambos países están intentando entenderse y  converger hacia un mismo punto, respetando sus líneas rojas. Además,  sumó al primer ministro italiano a su proyecto, para crear un grupo  lo más estable posible para recuperar la confianza.