Fiscalía archiva la denuncia contra el alcalde de Ubeda por supuesta prevaricación
La Fiscalía Provincial de Jaén ha rechazado y archivado la denuncia que el colectivo Manos Limpias le presentó contra el alcalde de Ubeda (Jaén), Marcelino Sánchez (PSOE), por un supuesto delito de prevaricación tras conceder una licencia de primera ocupación y utilización de unas viviendas en las calle Emperador Carlos y Marqués de Santillana.
Fuentes de la Fiscalía consultadas por Europa Press han señalado que, tras analizar este caso, constataron que no se había cometido delito alguno por parte de Sánchez en su actuación, de ahí que decidieran archivar el caso.
Una vez que el colectivo anunció que iba a poner esta denuncia, el alcalde Ubeda ha precisado a su vez que "el incumplimiento de la normativa urbanística a la que se hace referencia es sólo una cuestión puramente estética" y que, de hecho, los mismos técnicos recomendaron que se debería modificar el artículo de la ordenanza del PGOU al que hace referencia la supuesta denuncia del sindicato Manos Limpias porque existían cuerpos volados --elemento estético de la fachada-- sobre la vía pública que no cumplían con la normativa de este momento.
Sánchez ha especificado a Europa Press que precisamente ya ha sido modificado ese artículo de la ordenanza, que fue aprobado por el Pleno. "Se trataba de una ordenanza urbanística obsoleta, y que sólo debía hacer referencia al centro histórico, tal y como se establece en el PGOU vigente", ha analizado.
En este sentido, Sánchez ha subrayado que con el fin de evitar el perjuicio que se le podía ocasionar a los propietarios y familias de las casa --en total suman 39 viviendas-- se les otorgó la licencia de primera ocupación o utilización, "que era requerida por las familias, muchas de ellas habitando ya en dichas viviendas".
Por otro lado, tanto el constructor como los propietarios de estas viviendas, así como el registrador de la propiedad y el notario, consideraban que ya tenían licencia de primera ocupación o utilización, recurriendo a lo que se conoce como silencio administrativo. "Lo único que se hizo fue regularizar una situación, que de no haber sido así, podría haber llevado a los tribunales al Ayuntamiento con la consecuencia patrimonial que ello podría conllevar", ha justificado el alcalde de Ubeda.