Firmado el convenio del campo con una vigencia de tres años

La patronal y los sindicatos UGT y CC OO han firmado este miércoles  el nuevo convenio del campo de Jaén, el más importante de la  provincia al afectar a unos 100.000 trabajadores. El documento, que  finalmente tendrá tres años de vigencia y no uno como se había  acordado en un principio, contempla una subida salarial del dos por  ciento.

    14 dic 2011 / 15:35 H.

    Así lo ha explicado a Europa Press el secretario general de la  Federación de Industria y Trabajadores Agrarios (Fitag) de UGT-Jaén,  Antonio Marcos, tras el acto formal por el que se ha dado luz verde  al convenio, una vez que ambas partes alcanzaron un acuerdo hace una  semana y tras siete reuniones desde que el pasado 21 de octubre se  constituyera la mesa de negociación.  Marcos ha precisado que, con respecto a lo manifestado entonces,  ha habido una única modificación en cuanto al "horizonte temporal"  del documento que pasa de un año a tres, lo que ha saludado. "Parece  que la patronal ha reflexionado y lo consideramos positivo porque, de  lo contrario, estaríamos igual dentro de poco", ha señalado, al  tiempo que ha recordado que los empresarios "se mostraron reacios" a  firmar por un periodo más amplio por la situación compleja del  sector. Con esta novedad, según ha incidido, se mantiene la subida  salarial pactada del dos por ciento de forma efectiva para este  primer ejercicio, que empieza a 1 de octubre de 2011, y también se  prevé para los dos siguientes, aunque con matices. En este sentido,  ha aludido a la cláusula para 2012 y 2013 según la cual si el IPC se  sitúa entre el uno y el dos por ciento se aplicaría el IPC, mientras  que de estar por debajo del uno por ciento, se aplicaría esta cifra.  Es decir, se establece un techo del dos por ciento y un suelo del  uno. Con ello se garantiza una subida salarial mínima para los  trabajadores del campo del uno por ciento y no se produciría bajada  alguna, lo que viene a garantizar también la paz social en este  periodo en el que esperamos que la situación del sector se  normalice", ha apuntado Marcos, quien ha subrayado el "esfuerzo" en  la negociación en la que los sindicatos han sido conscientes del  panorama "complicado" en el campo. La patronal, por su lado, también ha resaltado el trabajo  realizado por ambas partes para cerrar el nuevo documento. Así,  Francisco Molina, secretario general de Asaja-Jaén, la organización  con más peso empresarial, ya que aporta seis de los doce  representantes con los que cuenta, mientras que los otros seis se los  reparten UPA y la Confederación de Empresarios, ha puesto en valor el  esfuerzo de los olivareros para llegar al dos por ciento y de los  trabajadores con su renuncia a parte del IPC "a favor de mantener  algo de subida que, como está el sector es importante". El citado incremento del dos por ciento se aplicará sobre los  46,91 euros en los que hasta ahora estaba estipulado el jornal en el  campo durante todo el año. En el caso específico del de la campaña de  la aceituna, el referido incremento se sumará a las cuantías que para  un jornal tipo de seis horas y media se venían cobrando en función de  la categoría: 47,94 euros para vareador-recogedor; 50,79 para  tractorista y 50,07 para auxiliar de vibradora autopropulsada y  vareador con vara mecánica.
    Junto a ello, el otro cambio que introduce el texto se encuentra  en el artículo sobre las incidencias meteorológicas. A partir de  ahora, habrá tres escenarios: si el trabajador se persona en el tajo  y la lluvia impide el desarrollo de la jornada, recibirá doce euros.  Desde el minuto uno a las tres horas y media de trabajo le cobrará la  mitad del jornal y por encima de las tres horas y media le  corresponderá el jornal completo.
    Con respecto a la esta campaña agrícola, que está en plena  actividad, tanto el secretario general de la Fitag de UGT-Jaén como  el gerente y portavoz de Asaja-Jaén, Luis Carlos Valero, se han  referido a una posible discriminación de la mujer en los tajos. El  primero ha afirmado a Europa Press que la están constatando al ver  que "se exige en ocasiones que la mujer llegue acompañada de un  hombre para ser contratada". "Es el segundo año en que está teniendo  más incendia y no queremos que se convierta en algo habitual", ha  defendido Marcos.
    Valero ha replicado durante el balance del año agrario de su  organización que "jurídicamente el tema está resuelto" y la mujer "no  está discriminada" ni como trabajadora ni como empresaria. "La  equiparación jurídica está ahí, que sea más efectiva o menos efectiva  ahí creo que no podemos llegar, es difícil llegar", ha indicado.
    En cualquier caso, ha insistido en que la relación con los  empleados es contractual independientemente de otras cuestiones como  el sexo. Lo mismo ocurre, según ha apuntado, con la nacionalidad  cuando desde algunas poblaciones se pide favorecer la contratación de  autóctonos, una situación a la que se ha pasado después de "muchos  años" de 'boom' de la construcción en los que casi nadie quería  recoger la aceituna, de ahí que haya dicho que los olivareros deben  "estar agradecidos a la inmigración". "Como empleadores, nuestra  relación es contractual. No distinguimos ni por raza ni por sexo ni  por credo ni por lugar de nacimiento. La gente que contrata, si  distingue por cualquier otra condición, es que a demás de ser  anticonstitucional está un poco tonta", ha zanjado.