Fernández de Moya: "Estoy a las duras y a las maduras, siempre dando la cara"

Ha gestionado la ciudad en los que considera los cuatro años “más difíciles de la historia democrática de Jaén”, pero no se arredra. José Enrique Fernández de Moya concurre a su reelección con un proyecto que califica de “ilusionante” y se siente dispuesto a revalidar la amplia mayoría que obtuvo en 2011. La entrevista se realizó el pasado martes, horas antes de que estallara la polémica por “enchufismo” en el Ayuntamiento (página 7) y que ha incendiado la recta final de la campaña electoral en la capital.

—¿Como resumiría estos cuatro años de mandato?
—Ha sido el más duro en la historia democrática de Jaén, caracterizado por la ruina municipal, con una deuda de 500 millones sobre un presupuesto consolidado de 180. Este equipo de Gobierno se ha dejado la piel por sacar adelante la ciudad y puedo decir con satisfacción que lo hemos conseguido. Este ha sido el Gobierno local que se ha comprometido con la política social y la vivienda pública, la generación de empleo y ha actuado de manera firme ante la ruina que representaba la peor herencia jamás recibida con el Gobierno de España como gran aliado.

—En la calle existe la percepción de que la ciudad se ha quedado estancada en estos años. ¿Lo achaca a la crisis, a la deuda municipal o a la gestión?
—Hay tres variables económicas que definen la situación del Ayuntamiento, y son objetivas. Están en el informe de la Intervención. Primero, una deuda de 500 millones, con 300 millones de deuda a proveedores, y un remanente de tesorería neto negativo de 204 millones. Hemos tenido que gestionar ruina pura y dura y, aun así, hemos conseguido sacar adelante la ciudad con diversos planes de empleo, como el pago a proveedores en el que insisto mucho, pero es que ¡es la realidad! ¡Nunca ha venido tanto dinero para hacer frente hasta 30.000 facturas! Eso lo ha hecho el Ayuntamiento gracias al Gobierno de España. Este ha sido el gran aliado y, después, hemos tenido a la Junta como la cobradora del frac. El Ayuntamiento ha hecho en este mandato todo lo que estaba en su mano, y más.

—¿Ha sido decepcionante sentirse como un “administrador concursal”?
—No, pero sí un gran reto, porque gobernar con dinero tiene que ser la leche, pero eso yo no lo voy a hacer. Y, en las circunstancias más adversas, ahí han estado el PP y 16 hombres y mujeres dando la cara y salvando la ciudad. Ha sido un reto, pero difícil y complicado, con mucho desgaste físico, personal, emocional y anímico.

—La situación del Ayuntamiento sigue siendo sumamente compleja. El pago del capital derivado de los planes a proveedores está a la vuelta de la esquina.
—Acabamos de recibir otra gratísima noticia del Gobierno. Teníamos retenida el 100% de la PIE (Participación en los Impuestos del Estado) y nos han liberado el 25%. El Ministerio de Hacienda ya está aportando, a partir de este mes, mayor liquidez. De los 2,1 millones que significa la PIE al mes, vamos a recibir 750.000 euros. Estamos negociando con el Gobierno que haya sucesivas liberaciones de la retención de la PIE y un plan financiero que me permita la renegociación global de la deuda al medio y largo plazo. Y estoy encontrando receptividad.

—¿Así no haría falta un rescate?
—Si somos capaces de negociar ese plan financiero, evidentemente, no habría… ¡Y tampoco lo hay! No hablo de rescate en la Junta, a pesar de que el Gobierno le ha puesto 20.000 millones.

—Uno de los “logros” que ha remarcado en este mandato ha sido pagar las nóminas. ¿Se ve en condiciones de garantizar la totalidad de los puestos de empleo?
—Nosotros hemos tomado medidas en todos los frentes. Cuando entré al Ayuntamiento, había 1.670 empleados. Hoy, 1.452, con prejubilaciones, amortización de plazas o contratos de obra y servicios que no hemos renovado porque no hay recursos. Además, en el capítulo 1, hemos ahorrado 5 millones en este mandato. Nada más entrar pusimos en marcha un plan de austeridad municipal. Y estoy en condiciones de garantizar el pago de las nóminas, como lo he hecho estos 4 años.

—¿Y los 1.452 empleos?
—Bueno, nos encontramos 1.670 y estamos en 1.452. Hemos hecho un esfuerzo y hemos reducido la plantilla con un ahorro de 5 millones. Hemos puesto en marcha muchísimas medidas de austeridad. Hemos sido los primeros en dar ejemplo.

—¿Garantiza, pues, el mantenimiento de todos los empleos?
—Lo garantizamos porque hemos venido trabajando para eso.

—¿Es necesaria una Relación de Puestos de Trabajo (RPT)?
—A través del área de Personal, tenemos que poner en marcha un diálogo con las centrales sindicales y los empleados para acometer la RPT, pero siendo conscientes de la situación económica del Ayuntamiento. Ahí también pido sensibilidad a las centrales sindicales. Todos tenemos que aportar medidas que estén llenas de rigor presupuestario y de sensatez.

—¿Se ampliará el control sobre las concesionarias?
—Sin duda.

—¿De qué forma?
—Nombrando un cuerpo de funcionarios de carrera para que existan controles. Cuando se está administrando dinero público, hay que hacer una rendición de cuentas hasta el último céntimo. Los jiennenses tienen derecho a conocer con plena transparencia la gestión de las concesionarias.

—Esto ya lo anunció a principios de mandato. ¿Por qué no se ha hecho y qué ocurre con el pliego de la basura?
—La lanzamos al principio del mandato, pero tuvimos que llevar a cabo una reorganización interna en el área de Personal porque teníamos en mente hacer una simplificación administrativa del Ayuntamiento. Priorizamos, pero el control sobre las concesionarias será fundamental. El pliego de la basura tenía que estar fuera en 2013, porque expiró en 2012. En estos dos años hemos trabajado con los servicios técnicos y es un pliego muy complicado, porque tenemos que ver el precio mínimo de licitación. Actualmente, se pagan 15 millones al año y la tasa por recogida de basura arroja un ingreso de 6 millones. Hay un desequilibrio estructural de 9 millones y el pliego vigente, y que queda prorrogado hasta que se licite el siguiente, no contempla zonas nuevas que se han incorporado a la ciudad. Y estamos en negociación con la Diputación respecto al vertedero. Pero sí es verdad que el pliego de la basura tiene que ser en este año una realidad.

—¿El tranvía llegará a circular?
—He hecho muchos intentos con la Junta y todos baldíos y un Ayuntamiento con serias dificultades para pagar la luz no puede destinar entre 800 y 1.000 millones de pesetas en ese capricho. Me reuní con 8 empresas privadas. Todas dijeron que el tranvía era una ruina. Convoqué a la Junta, a la Diputación y al Consorcio y se desentendieron. Pero si salgo reelegido, haré un último intento de convocar a todas las administraciones con la vocación metropolitana del tranvía. Que se llega a un acuerdo, lo vemos. Si no, el PP tiene un plan alternativo.

—¿Cuál es ese plan?
—Se dará a conocer en su momento, pero tenemos ideas muy avanzadas, si la Junta se desentiende.

—¿La Catedral tiene opciones de ser declarada Patrimonio Mundial?
—Estoy convencido de que lo será, pero si va con Úbeda y Baeza. Sola, nunca. Lo dicen los expertos y vamos a seguir peleando por ello. Lamentablemente, todo el mundo conoce la actitud sectaria del PSOE y del alcalde de Baeza en una estrategia miserable que pagarán en las urnas.

—¿Por qué no ha mostrado la propuesta de simposio internacional que tiene sobre la mesa? ¿Motivos económicos?
—El profesor Pedro Galera ya me ha pasado el presupuesto. Está en torno a 40.000 euros y hemos cerrado con una entidad, Banco Mare Nostrum, el 50% de la financiación. Lo firmaremos en breve. Y, ahora, porque la Catedral es cosa de todos, me dirigiré al resto de las administraciones para que financien el resto.

—Si gana las elecciones, ¿se quedará los cuatro años?
—Cuando acepté mi designación como candidato en septiembre de 2009, mi reto era que la Alcaldía volviera al PP. Para mí es un orgullo haber sido el alcalde más votado en la historia democrática de Jaén. Ahora, el PP está en condiciones de revalidar una amplia mayoría social en la ciudad. A partir de ahí, lo que pueda pasar en mi vida, como en la suya, dentro de 5 minutos, nadie lo sabe, por cuestiones personales y profesionales. Pero he tenido la oportunidad de poder dar el salto, desde el punto de vista político y profesional, a otros niveles y he apostado por Jaén.

—¿Y volverá a hacerlo durante otros cuatro años?
—Mi candidatura está ahí. Yo quiero estar a las duras y a las maduras, dando la cara. Ese es un rasgo que me define.

—Pero ¿los cuatro años?
—Hay un hecho incontestable, que es la última vez que me presento y lo hago para estar los cuatro años. Ahora bien, tengo que matizar, como ser humano, que no sé cuáles van a ser mis circunstancias personales, profesionales o políticas a lo largo de esos cuatro años.

—Si el PP no gana con una amplia mayoría el domingo, ¿baraja la posibilidad de pactos?
—El voto útil en estas elecciones es el de la estabilidad institucional y lo representa el PP. Aquí solo caben dos fórmulas: o gobierna el PP o lo hacen todos contra el PP. Mi pacto es con la sociedad jiennense hasta que esta hable en las urnas. Si, una vez que lo haga, no se articulan mayorías suficientes para gobernar en solitario, en función de los resultados, evidentemente, gobernar será pactar. Pero no lo haré ni con el PSOE, ni con Podemos o Jaén en Común, que es su marca blanca.

22 may 2015 / 14:46 H.