23 ago 2015 / 08:34 H.
Es una imagen tópica, pero se ciñe a la realidad de lo que supone ExpoHuelma, un escaparate único para mostrar los avances agrícolas y ganaderos de Mágina y, por extensión, de Jaén. Los profanos en la materia no logran entender la importancia de una muestra que lleva ya treinta y dos ediciones y que en pleno agosto es capaz de conseguir que casi 130 empresas instalen sus novedades, servicios y productos en esta población. Además, muchas de ellas tendrán que esperar a próximas ediciones ante la imposibilidad material de abrirles un hueco, lo que da muestra del dinamismo y de la importancia que los negocios dan a la cita. Además de las novedades de maquinaria, ExpoHuelma es capaz de sacar del “anonimato” mucho trabajo artesano que encuentra en este tipo de ferias un lugar idóneo para establecer nuevas relaciones de negocio, sinergias y, sobre todo, ventas. Si al componente económico se le añade la posibilidad de divulgar la importancia de razas ganaderas en peligro de extinción, el valor de la muestra sube exponencialmente. Las propuestas mejoran en cada edición y así, en esta ocasión, hay un buen maridaje entre el aceite de oliva y el resto de iniciativas ganaderas para completar una oferta que es atractiva no solo para los habitantes de la comarca, sino también para llegados desde otros puntos de Andalucía. Un foco, por lo tanto, de atracción que es capaz de mantener su vigor en una época, “a priori”, poco propicia para grandes actos y que, sin embargo, alcanzará los 20.000 visitantes. Un motivo de orgullo para sus habitantes, para quienes dan apoyo institucional y administrativo, y para toda una población que acoge con nota a todo el que llega.