Esfuerzos en vano por la limpieza
Irene Bueno / Jaén
La plata de la escoba que recibió el Ayuntamiento de Jaén en mayo no luce todo lo brillante que debiera. Los vecinos culpan al Consistorio de carencias en el servicio de limpieza, mientras que este anuncia que presentará una campaña para sensibilizar a la población sobre pautas encaminadas a mejorar el aspecto de la ciudad.

La plata de la escoba que recibió el Ayuntamiento de Jaén en mayo no luce todo lo brillante que debiera. Los vecinos culpan al Consistorio de carencias en el servicio de limpieza, mientras que este anuncia que presentará una campaña para sensibilizar a la población sobre pautas encaminadas a mejorar el aspecto de la ciudad.
Puntos de interés turístico de primer orden para la ciudad de Jaén como es el entorno del Castillo de Santa Catalina o la calle Martínez Molina, la principal arteria de conexión con el casco antiguo y puerta de acceso a espacios como los Baños Árabes, el Raudal de La Magdalena o la iglesia de este mismo nombre, ofrecen una lamentable imagen a los visitantes. Así lo denuncian vecinos y empresarios hosteleros.
En este sentido, la Oficina Municipal de Turismo reconoce que los propios viajeros se hacen eco de una situación que no ofrece la mejor cara de Jaén. Los solares abandonados y sin un correcto cerramiento, las bolsas de basura en la calle durante las horas centrales de la jornada y la presencia de vidrios y plásticos arrojados en cualquier lugar son algunos de los puntos rojos que los turistas le asignan a la capital.
En este contexto, el Ayuntamiento recuerda el dicho popular que asegura que “no es más pulcro quien más limpia sino quien menos ensucia”. El concejal de Mantenimiento Urbano, Eduardo Castro, asegura que en estos momentos se hace un esfuerzo, “como nunca antes”, por mantener limpia la ciudad. Existen tres dispositivos de mañana, tarde y noche, con diferentes cometidos —desde barrer y recoger residuos del suelo, hasta desocupar los contenedores y fregarlos para que no huelan— con el objetivo único de que Jaén sea un lugar agradable tanto al visitante como al vecino. Sin embargo, apunta, todavía hay ciudadanos que tiran la basura fuera de las papeleras o que sacan las bolsas sin ser el horario indicado para ello, acción que, por otra parte, es sancionable. Este es uno de los motivos por el que el Ayuntamiento presentará en breve una campaña de sensibilización.
denuncias. Por su parte, los vecinos de la calle Martínez Molina denuncian la escasez de contenedores en los que poder depositar la basura. Explican que esto obliga a los residentes a depositar las bolsas junto a los pivotes metálicos de las aceras. Aseguran que perros, gatos, así como alguna persona con escasas nociones de civismo encuentran estos “paquetes” como objetos de particular interés y los desperdicios terminan esparcidos por las aceras y las calles.
Del mismo modo, reconocen que no todo el mundo cumple con la normativa que regula el horario para depositar la basura fuera de la casa por lo que se convierte en habitual el hecho de encontrar estas bolsas, durante el día, en las aceras próximas a los lugares de interés de los turistas.