Entretenimiento vs deporte

Decía don Gregorio Marañón en sus 'Tres ensayos sobre la vida sexual' 'que el deporte como ocupación única de la vida, es patrimonio de gentes inferiores, que hacen deporte para que la Naturaleza les perdone el pecado mortal de no trabajar'.

    28 oct 2011 / 09:49 H.

    Era el doctor Marañón un amante del verdadero deporte, ese que trae consigo la salud y la alegría, que nos ayuda a vencer los obstáculos, la fatiga, enfermedades como la obesidad, la depresión y que alivia los efectos negativos de la comodidad y el sedentarismo de nuestra sociedad moderna. No se puede confundir el entretenimiento con ese benéfico y saludable deporte, ese que no es más que una actividad organizada para el disfrute de los jugadores. Desde el momento en el que se introducen en él los intereses de los espectadores deja de ser juego y actividad deportiva para convertirse en entretenimiento, en circo. Todo lo que gira en torno al entretenimiento del gran público, de los espectadores, es cualquier cosa menos deporte. Les propongo la sustitución del término deporte, ese vocablo tan desfigurado, tan utilizado fuera de su significado, por el término entretenimiento. Sería curioso leer la sección de entretenimiento de un diario o escuchar o ver un espacio radiofónico o televisivo de entretenimiento. Quizás ese negocio colosal mal llamado “deportivo” perdería parte de esa masa pasiva de “consumidores” de espectáculo y noticias mal llamadas “deportivas”; quizás esas cifras de contratos, de transacciones multimillonarias se invertirían en el desarrollo científico neutral, cultural y en educación, hasta incluso en educación deportiva. En fin, ¡Soñar es gratis! Es curioso observar a esos consumidores sedentarios de lo mal llamado deportivo que no practican habitualmente ejercicio físico. A mí que tal o cual sea sedentario no me altera, pero lo que sí me pone nervioso es cuando se favorece y se incentiva esta forma de entender el deporte desde las instituciones y personas públicas. Esta forma de alienación pseudodeportiva, de opio para el pueblo, nos llega de forma desmesurada y deforme. Que el deporte tiene un gran interés público es una perogrullada, pero es la verdad, es así de simple. El deporte, el ejercicio físico es importantísimo para la prevención y curación de enfermedades físicas y mentales, es una forma de socializar, de comunicarse, de identificarse culturalmente, es, en definitiva, un bien necesario que hay que cuidar. Nunca es bastante el esfuerzo dirigido a la construcción de áreas de recreo, instalaciones deportivas, programas de formación deportiva, aumentar el nivel de los educadores deportivos, no es más que una cuestión de interés público.
    Miguel Ángel Olivares es escritor