En verano no se enferma

Hace unos días escuchaba a una pareja, embarazadísimos, que ojalá no se retrasara la fecha del parto y su hijo naciera a finales de junio como estaba previsto, y no en julio, como finalmente ha sido. El motivo, según ellos, que había muchos menos medios, menos camas. Y qué razón tenían estos jóvenes (ya hoy) padres. Durante los meses de verano la política que se aplica en la Sanidad es el cierre de camas, el cierre de plantas, la no contratación, o lo que viene a resumirse con una palabra: Recortes. Unos recortes alarmantes, desmesurados, que afectan a algo tan delicado y sumamente importante como es la salud de la ciudadanía. Según los propios datos publicados por el Complejo Hospitalario de Jaén, el número total de camas que se utilizan en los diferentes centros de la capital —Médico Quirúrgico, Materno-Infantil, Doctor Sagaz y Neurotraumatológico— es de 725. De ellas, entre el 1 de julio y finales de septiembre se van a inhabilitar entre 83 y 185 camas, según la quincena y el mes. Y es que no podemos tolerar este cierre masivo y que no se hagan contratos para sustituir al personal sanitario que está de vacaciones o de baja. Más teniendo en cuenta que, dada la situación económica general, cada vez son más los jiennenses que se quedan en la ciudad y soportan el calor como buenamente pueden o viajan unos días, pero pocos y con bajo presupuesto. Así que, señores lectores, en verano no se enferma. Solo en la primera quincena de julio las camas cerradas rozan el 18%, en la segunda el 24,1% y durante el mes de agosto la inhabilitación de camas supera el 25%. Una situación que se extenderá hasta finales de septiembre. También el Hogar de Alta Supervisión del centro hospitalario Doctor Sagaz (Neveral) para pacientes psiquiátricos está cerrado hasta el 16 de septiembre (75 días) y la Unidad de Cirugía Ambulatoria y la Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil cerrarán durante el mes de agosto. ¿Son necesarios estos recortes en derechos fundamentales de la población? Creo que no. En este caso es peor el remedio que la enfermedad. Y nunca mejor dicho. 

    06 jul 2014 / 22:00 H.