Empresas en la cuerda floja

Manuela Rosa Jaenes
Es la pescadilla que se muerde la cola. No se vende, no hay dinero para pagar y la banca no presta porque no hay garantías de devolución. Es el panorama actual de la economía jiennense, andaluza, nacional y mundial. Los economistas coinciden en señalar que la crisis del siglo XXI pasará a la historia como la más dura de los últimos cincuenta años.

    08 feb 2009 / 11:58 H.

    ¿Por qué? Porque es financiera, económica y, además, global. Afecta a todos y no distingue entre idiomas. Los más perjudicados, los pequeños empresarios, aquellos que se encuentran con el agua al cuello y en un túnel en el que no encuentran salida. Las cuentas ya no cuadran y algunos comienzan a arrojar la toalla.
    El incremento de las cifras del paro, la bajada de las matriculaciones o el escandaloso descenso del precio de la vivienda son algunos de los indicadores que presagian un desenlace fatal. El empresariado jiennense se encuentra en un momento más que difícil. Tomás Boyano, economista y consultor externo de empresas, asegura que el problema surge por la conjunción de dos variables que, aunque antes eran complementarias, ahora tienen efectos perversos: una disminución de la cifra de ventas y una situación de elevado endeudamiento financiero. Es decir, antes las empresas pedían créditos para poder vender más y, en la actualidad, ese “endeudamiento sin fronteras” ha caído en saco roto. Como hay más deudas, el consumo familiar se contrae y las empresas cuyo negocio entronca con las ventas empiezan a caer. ¿Cómo intentan sobrevivir? Reduciendo costes (personal, inversión en maquinaria, instalaciones, publicidad, pedidos, entre otras medidas). “Esta fuerza centrífuga que impone el mercado expulsa a las empresas con menor capacidad de aguante”, expone Tomás Boyano. La caída de la demanda es una de las caras de la moneda. La otra radica en la banca. El sistema financiero sufre una crisis de liquidez desde el verano pasado. Fuentes consultadas por este periódico apuntan a que todo comenzó con el miedo de las entidades a prestarse dinero entre ellas. La consecuencia: reducción de los créditos existentes y de los nuevos. Un drama para las pequeñas y medianas empresas que, hasta aquel momento, se habían beneficiado de una política de fácil y barato endeudamiento. Los empresarios han pasado de estar acostumbrados a tener una póliza para sufragar los gastos corrientes que se renovaba de forma automática a estar sometidos a la obligación de devolver a la banca todo lo que pidieron en un abrir y cerrar de ojos. ¿Cómo lo hacen? A través de la descapitalización de la empresa, del impago a proveedores, de despidos, cierres...
    Un estudio de la Cámara de Comercio señala que el 17% de las empresas no logra acceder a financiación bancaria y el 83% restante no obtiene todo el nivel de ayuda que necesita o lo consigue más caro y a costa de presentar mayores garantías. A esto se une que el 50% de los negocios que piden un préstamo ICO en sus entidades se encuentra con dificultades para conseguirlo e, incluso, con condiciones demasiado exigentes.
    El secretario de la Confederación de Empresarios de Jaén, Mario Azañón, hace un llamamiento a la banca para que “fluya el crédito” para las empresas, algo que considera primordial para mantener la actividad diaria. En este sentido, se queja de las “trabas financieras”, que resume en tres puntos. En primer lugar, para obtener liquidez se exigen “excesivas” garantías. En segundo lugar, la banca no acepta el tradicional sistema de pago, el pagaré. Por último, eliminan y reducen las pólizas de crédito. Insiste: “Creo que es necesario, con urgencia, que fluya el crédito y se inyecte liquidez a las empresas para salvaguardar el empleo, a las familias e incentivar el consumo”. Apunta un dato importante: “Los mayores índices de morosidad se dan en la Administración”. Mario Azañón exige una flexibilización de los trámites burocráticos y financieros para salvar a las empresas jiennenses de la crisis.
    parón. En la misma línea se expresa el consejero delegado de Aceites Atenea, Cristóbal Gómez, un buen ejemplo de lo que ocurre hoy en día: “Llegamos cinco años trabajando para los bancos, con una media de pagos de entre setenta y ochenta mil euros al año”. Explica que si las entidades bancarias no refinancian las deudas a los empresarios, se parará el ciclo productivo y el paro aumentará hasta cifras incontables.
    Las grandes dificultades se centraban, al principio, en el sector de la construcción que, por efecto dominó, ha dañado al resto del tejido productivo de la provincia. Un afamado constructor jiennense, que prefiere mantenerse en el anonimato, vive unos niveles tan altos de morosidad que se le llenan los ojos de lágrimas sólo con pensar en el futuro del negocio de su vida y, sobre todo, en el de sus empleados, cientos de familias. Así hay cientos de casos. En cada esquina, en cada puerta, hay una historia similar que parece no tener solución. Y, en todas, la incertidumbre se convierte en una pesadilla.
    En el lado opuesto se encuentra la banca. Todos los directivos consultados por este periódico coinciden en señalar que no han cerrado el grifo al tejido productivo jiennense, y mucho menos a las familias. Ahora bien, miran con lupa cada aval antes de conceder un crédito. Hay empresarios que aseguran que si detectan que hay alguna empresa de la construcción detrás de un pagaré, directamente deniegan la financiación solicitada. Los directivos de las entidades bancarias hacen un llamamiento a los gobiernos para que les garanticen de alguna forma que el dinero que prestan será devuelto después. De ahí las reuniones, en las últimas semanas, con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y con el presidente de la Junta, Manuel Chaves. A la pregunta: ¿Cuándo terminará la crisis?, la respuesta es dispar. Hay quienes piensan que está a punto de expirar, otros auguran que no durará más de un año y los que más se remontan a 2011 para poder empezar a ver la luz.
    Por último, desde la Administración pública hay conciencia de la coyuntura económica jiennense. Sin embargo, la Junta de Andalucía hace un llamada de atención a los empresarios para que se animen a solicitar alguna de las muchas ayudas que existen para paliar la situación. El delegado de Innovación, Ciencia y Empresa, Manuel Gabriel Pérez Marín, asegura que nunca hubo una conjunción de subvenciones tan enorme para solucionar un mismo problema. En este sentido, insta a los jiennenses a que agudicen el ingenio y apuesten por la innovación como medida alternativa. “Nosotros tenemos muchos instrumentos para que no se pierda músculo empresarial en la provincia”.
    Mientras la obra pública se convierte en el “tubo de escape” del empresariado jiennense, en la panacea y el remedio de todos los males, las cifras abundan en una situación catastrófica. La realidad es que las empresas echan el cierre, que la lista de parados no tiene final y que el futuro nunca pudo ser más incierto. Los empresarios luchan como pueden para tensar la cuerda.

    Habla la banca....créditos; Habla la banca....garantías

    JOSÉ ANTONIO SERRANO MARTOS
    Subdirector de Caja Duero en Jaén

    “Me indigno porque echan siempre la culpa a los bancos”
    José Antonio Serrano defiende a capa y espada la banca: “Me indigno porque siempre nos echan la culpa”. Explica que el problema radica en que las entidades bancarias no pueden prestar dinero “alegremente”, porque si se producen impagos, no pueden devolverlos. “Hay una coyuntura mala. Las empresas no tienen la solvencia de hace dos años y la banca tiene miedo de prestar”, comenta. Propone como solución una fusión para fortalecer el sistema bancario con vistas a un futuro inmediato. “La unión hace la fuerza, eso es seguro”, concluye.


    FIDEL JIMÉNEZ SÁNCHEZ
    Gerente de Empresas de Santander en Jaén

    “Damos facilidades para aliviar a las empresas”
    “El grupo Santander está en disposición de dar y una norma es no acudir a la vía judicial, por lo que refinanciamos como sea y damos todo tipo de facilidades a las empresas”. Fidel Jiménez es consciente de la situación de crisis, aunque se muestra optimista. Dice que el problema tiene como base el parón de la construcción, lo que ha ocasionado el endeudamiento de los empresarios y, en última instancia, la imposibilidad de financiar sus deudas. “Hay empresarios con muchos bienes, pero sin liquidez”, apunta. “Estamos todos asustados”, añade.


    JOSÉ BOYANO MARTÍNEZ
    Delegado territorial de CajaGranada en Jaén

    “Evaluamos todos los riesgos antes de prestar dinero”
    José Boyano aporta un dato contundente: el año pasado, las entidades bancarias de la provincia de Jaén prestaban una media de 100 millones de euros mensuales y este año la cifra se ha reducido a 30 millones de euros. Como responsable de CajaGranada, reconoce que, actualmente, se evalúan todos los riesgos de los empresarios antes de conceder financiación. “El nivel de endeudamiento no puede superar el 40%”, comenta. Añade: “Sólo cogemos los pagarés de aquellas empresas que tienen solvencia. Miramos más con lupa”.


    DIONISIO MARTÍN PADILLA
    Director general de la Caja de Jaén

    “La Caja de Jaén no ha cerrado el grifo en modo alguno”
    Dionisio Martín dice que ha vivido seis crisis desde que trabaja en el sector financiero y, sin embargo, ninguna se parece a la actual, porque es doble: financiera y económica y, además, global. Apunta que la caja ha tomado cinco medidas: fortalecer liquidez, controlar la morosidad, mejorar la eficiencia, reforzar las ratios de solvencia y de cobertura y mantener el compromiso con los clientes. En este sentido, señala: “La Caja de Jaén no ha cerrado el grifo en modo alguno”. No obstante, admite que la capacidad para devolver los créditos es muy baja.


    BRAULIO MEDEL CÁMARA
    Presidente de Unicaja

    “Hemos rechazado créditos en época de bonanza”
    Braulio Medel se esfuerza en revestir de cierta normalidad el comportamiento actual de las cajas. Según él, hace dos años, en plena bonanza económica, se rechazaban también operaciones y, en 2008 se concedieron más préstamos que en 2007. “Hay unos criterios de riesgo que son permanentes y eso no depende del ciclo económico”, comenta. A su juicio, las entidades a la hora de dar financiación se mueven entre la presión del mercado y la prudencia que les aconseja el Banco de España. “Tan malo es pasarte como no llegar”, apunta.


    JOSÉ MÁRQUEZ ALCÁNTARA
    Director comercial de la Caja Rural de Jaén

    “Estamos concediendo créditos como siempre”
    José Márquez asegura que la Caja Rural de Jaén es una entidad financiera sin problemas de liquidez. “Estamos concediendo créditos como siempre y estudiamos, también como siempre, la capacidad de devolución del acreditado”, comenta. No obstante, indica que sí se ha detectado un incremento de empresas que tienen menos capacidad para devolver los créditos, derivado de la situación de crisis por la que atraviesa el país. A pesar de todo, remarca que la Caja Rural es la entidad con mayor cobertura de la provincia y un bajo índice de morosidad.


    Hablan los empresarios

    ANTONIO CABEZA LOPERA Ofiteat, de Jaén
    “El banco no me da créditos”
    “El banco no me da financiación para soportar los altos niveles de morosidad”. Así de contundente se muestra Antonio Cabeza, un empresario que ve cómo peligra cada día su negocio por los impagos de los clientes. Asegura que si la solución no mejora no tendrá liquidez ni siquiera para pagar las nóminas de sus empleados. Dice que la Administración es la principal “morosa”. “Coges obras públicas pensando que es un cliente seguro y luego no te pagan”, añade. Pide ayuda para solucionar la crisis.

    MIGUEL ÁNGEL LIJARCIO CONTRERAS Cerámica Bailén, de Bailén
    “Mi fábrica está parada”
    “Nuestro problema no radica sólo en la bajada de las ventas, derivada del descenso de la construcción, sino también en la falta de liquidez por la morosidad”. Así resume Miguel Ángel Lijarcio la situación coyuntural que atraviesa su empresa, una firma que ha pasado de tener veintidós trabajadores a mantener sólo a uno. Dice que la fábrica de ladrillos está parada desde septiembre. No obstante, confía en que en marzo la situación comience a mejorar, porque tiene previstas fuertes inversiones medioambientales.

    SERGIO RUBIO PANCORBO Lumisur, S. C. A., de Jaén
    “El cliente no tiene dinero”
    “El principal problema es que el cliente no tiene dinero y, por lo tanto, no demanda nuestros servicios”. Sergio Rubio indica que las ventas han caído en un 50% en sólo seis meses, lo que ha conllevado el despido de la mitad del personal. Asegura que la financiación bancaria es otro caballo de batalla al que se tienen que enfrentar día a día. En este sentido, explica que la entidad con la que han trabajado toda la vida le ha negado un crédito y se han tenido que ir a otra, sin obtener respuesta. Ve el futuro incierto.

    CARMEN CLEMENTE CABEZA Ssangyong, de Jaén
    “Vendemos un 40% menos”
    La bajada de las ventas en el sector automovilístico es más que evidente. Carmen Clemente dice que en el concesionario del que ella es responsable de Administración, la cifra alcanza el 40%. “La crisis se nota también en la financiación, en el taller y en los recambios”, apunta. Asegura que, en la actualidad, los clientes demandan coches pequeños, de segunda mano y muy baratos. Asegura que la situación que se vive en este ámbito es de incertidumbre total y augura un “futuro muy negro”.

    ANDRÉS RODRÍGUEZ GONZÁLEZ Macrosad, de Jaén
    “No tenemos liquidez”
    Es socio de una empresa cooperativa en la que trabajan alrededor de cien personas. Por el momento, los recortes no se notan en Macrosad, aunque Andrés reconoce que sufre una falta de liquidez y, sobre todo, problemas de financiación. “Tenemos tres operaciones con entidades financieras que no se cierran”, comenta. En este sentido, asegura que la banca está más preocupada en devolver el dinero que le presta Europa o América que en ayudar a la economía social. Apuesta por un cambio de modelo.

    MANUEL SEDEÑO MOLINA Comecon, S. C. A., de Mengíbar
    “Es muy duro no poder pagar”
    Es uno de los empresarios jiennenses que más han notado la crisis, hasta el punto de que de los doscientos empleados que tenía ha llegado a mantener sólo veinte. “Mi principal problema fue la construcción de un hotel en Mengíbar, del que me deben 3,7 millones de euros”, comenta. Añade que, en total, le adeudan más de seis millones de euros, lo que ha repercutido de forma negativa en muchas pequeñas empresas del municipio, que eran sus proveedores. “Es muy duro no poder pagar”, lamenta.

    ANA FERNÁNDEZ RÍOS Ríos de Segura, S. L., de Cortijos Nuevos
    “He alquilado mi negocio”
    Es la propietaria de El Cortijo del cura, situado en Cortijos Nuevos, y se ha visto obligada a alquilar su negocio a una empresa gestora. “Ahora bien, reconozco que el problema ha sido más de agobio administrativo que de crisis en sí”, comenta. Explica que hace dos años solicitó permiso para la construcción de una piscina y todavía no ha obtenido respuesta. La consecuencia: bajada de la clientela y fuerte reducción de los ingresos en los meses de verano. Hasta que no pudo soportar más la situación.

    AMADOR LUQUE ORTEGA Talleres Luque, de Martos
    “Cerraremos en seis meses”
    “No hay trabajo y los bancos nos tienen asfixiados. Ni cogen pagarés ni nos dan créditos. En cuanto ven que los fondos provienen de un constructor, ni te los miran”. Es la vivencia personal de un empresario que sufre las primeras consecuencias de la crisis. “El remedio que tenemos es hacer frente al problema con fatigas y echando gente a la calle”, dice. De ocho personas que había en septiembre, han pasado a tres trabajadores. “No hay trabajo y no cobramos. A mi empresa no le echo más de seis meses”.

    JOSÉ LUIS CORTÉS CABRAS Albasur, de Lopera
    “Hemos despedido a gente”
    Son cinco las personas que tuvieron que abandonar esta cooperativa antes de comenzar la recolección de la aceituna. Es la consecuencia de la parada de la construcción que sufre la provincia. José Luis Cortés explica que es muy difícil sacar proyectos adelante, principalmente por los problemas que ponen los bancos a la hora de conceder financiación. “Sólo dan los créditos si tienes las viviendas vendidas. Son tantas las garantías que exigen que no podemos cumplirlas”, apunta. Ve “negro” el futuro.

    MARISA FERNÁNDEZ MOYA Hotel Rural Jurinea, de Torres
    “El hotel está vacío”
    “Desde que comenzó el año no hemos tenido ni una sola persona alojada en el hotel y la única perspectiva que tenemos es el Día de los Enamorados”. Marisa Fernández se queja de la bajada de la clientela del sector servicios. La consecuencia se nota en la dañada economía familiar: “Llevamos sin cobrar desde noviembre. Ahora bien, a mi empleada sí le pagamos”. Dice que el problema se extiende en la comarca. “Nosotros hacemos muchos descuentos y ofertas, pero no llaman ni para preguntar”, apunta.

    JAVIER MARTÍNEZ MORALES Iberautos López, Citröen de Jaén
    “Habrá que reducir gastos si sigue así”
    Es jefe de Ventas y asegura que sólo en el mes de diciembre se registró una bajada de un 50% del negocio. Se muestra preocupado por la situación, aunque todavía no ha habido despidos. “El futuro pasará por reducir gastos. Lo que no sabemos es cómo será”, apunta. Otro problema añadido es que lo que se vende, se hace a precios muy bajos.

    JOSÉ ANTONIO PRIETO BOCANEGRO Grupo Critt, de Jaén
    “Existe crisis y también miedo escénico”
    Dirige una empresa de trabajo temporal y ha constatado el crecimiento de demandantes de empleo en los últimos meses, que lo sitúa en un 25%. Al tratarse de un grupo de empresas de trabajos integrados, la crisis no ha tocado aún su terreno. Sin embargo, encuentra un inconveniente: los bancos “miran con lupa” antes de financiar un proyecto.

    NURIA LÓPEZ PÉREZ La fábrica del diseño de Jaén
    “Estoy asustada porque sé que me llegará”
    Nuria López tiene la suerte de no haber notado la crisis aún en su empresa. Sin embargo, se muestra “asustada”. “Sé que me tiene que llegar tarde o temprano”, admite. Ahora bien, conoce a muchas mujeres empresarias que tienen problemas para continuar, sobre todo, por las trabas con las que se encuentran en los bancos para refinanciar créditos.

    JOSÉ MARTÍNEZ MARTÍNEZ Prodemedia, S. C. A., de Jaén
    “Tres personas han ido a la calle en tres meses”
    En su empresa se han dado tres despidos en tres meses. La preocupación es que el futuro es complicado. “Es difícil hacer clientes, porque los servicios que ofrecemos requieren invertir en tecnología y no hay dinero”, dice José Martínez. No obstante, admite que la situación de su cooperativa no está mal. Tienen problemas con los bancos.