Empiezan a funcionar los nuevos semáforos

Javier Esturillo/Jaén
Que las obras del tranvía encaran su recta final es algo irrebatible. Hay menos vallas metálicas, se puede circular con más o menos normalidad en la mayoría de los tramos y el ensordecedor ruido de los martillos demoledores ha dejado de machacar los tímpanos de los jiennenses.

    27 oct 2010 / 09:45 H.

    Otra prueba que demuestra que cada vez queda menos para que el tren urbano de Jaén eche a andar es la entrada en funcionamiento del sistema semafórico que regulará el tráfico en los 4,7 kilómetros de trazado. De momento, lo hacen los aparatos situados en el tramo interurbano que va desde la rotonda de la Acelerada hasta las cocheras de Vaciacostales, mientras que se acaban de montar los instalados en  el trazado urbano. En total, serán 295 los semáforos —no sexistas— encargados de ordenar la circulación, tanto del propio tranvía como de los vehículos y de los peatones.
    Así, de esa cantidad, noventa están destinados al tráfico rodado, ochenta y ocho a regular el paso de los trenes y el resto a los peatones. Estos últimos incorporan señalización visual y sonora para facilitar el cruce a personas con problemas físicos, visuales y acústicos. Todos disponen de repetidores, colocados a media altura, que permiten a los conductores conocer desde una distancia prudencial las indicaciones. El sistema se ordena mediante los denominados armarios reguladores, situados a lo largo de toda la línea —diecisiete en total—, que se encargan de sincronizar los tiempos de prioridad de los semáforos. Estos cuentan con la “última y más avanzada tecnología”, según expone el delegado de Obras Públicas y Vivienda, Rafael Valdivielso.
    También se ha creado un sistema de prioridad —detectores empotrados en la vía y conectados con el regulador de semáforos—, capaces de indicar al armario controlador el instante de llegada al cruce del tranvía. Su función es “manejar” los tiempos  de intersección con el fin de permitir el paso de los vagones cuando se acerque al cruce. Para realizar todas las conexiones entre semáforos y armarios de regularización y los detectores se han utilizado unos treinta y siete mil metros lineales de cable. “En seguridad, no vamos a escatimar recursos ni esfuerzos. Es una prioridad para que esta capital cuente con uno de los sistemas tranviarios más modernos y mejor preparados no sólo de Andalucía, sino del resto del Estado”, recalca el delegado de Obras Públicas.
    Las obras de la primera línea de tren ligero metropolitano, que recorre un trazado de 4,7 kilómetros, comenzaron en abril de 2009 y se espera que estén acabadas a principios de diciembre. Lo que todavía no ha llegado a la capital son las primeras unidades del tranvía de Alstom.