El robo del cableado deja sin alumbrado la Vía Verde del Aceite
Con la llegada de las altas temperaturas, los aficionados al deporte que se citan en la Vía Verde del Aceite no tienen más remedio que cambiar sus horarios para caminar, correr o pasear en bicicleta. De esta manera, unos tendrán que madrugar para acudir a primeras horas de la mañana, mientras que otros deberán apurar los últimos rayos del sol para evitar un golpe de calor. Sin embargo, quienes hayan optado por el final de la tarde y comienzo de la noche, tendrán otro inconveniente: solo contarán con el alumbrado que les llegue del polideportivo. Además, no hay visos de que se vaya a restablecer la luz del camino, al menos, a corto plazo.
Con la llegada de las altas temperaturas, los aficionados al deporte que se citan en la Vía Verde del Aceite no tienen más remedio que cambiar sus horarios para caminar, correr o pasear en bicicleta. De esta manera, unos tendrán que madrugar para acudir a primeras horas de la mañana, mientras que otros deberán apurar los últimos rayos del sol para evitar un golpe de calor. Sin embargo, quienes hayan optado por el final de la tarde y comienzo de la noche, tendrán otro inconveniente: solo contarán con el alumbrado que les llegue del polideportivo. Además, no hay visos de que se vaya a restablecer la luz del camino, al menos, a corto plazo.

La falta de iluminación en el tramo de la Vía Verde, a su paso por el municipio de Jaén, se debe, principalmente, a una medida tomada por el consorcio.“El año pasado hubo una oleada de robos del cableado y algunas farolas en los recorridos de Jaén, Torredonjimeno y Alcaudete”, recuerda la diputada de Medio Ambiente, María Angustias Velasco, para indicar, que se llegó a poner en conocimiento en la reunión que mantuvieron los integrantes del consorcio a finales de 2013 —“cita a la que faltaron los responsables de los ayuntamientos de Jaén y Torredonjimeno”, dice Velasco—. “La ‘solución’ fue no reponer el cableado, porque en Jaén se cuantificaron unos 60.000 euros de pérdidas, e instalarlo de nuevo no nos garantizaba que volviera a ser robado”, explica la diputada. Y es que, según apunta, se trata de un sistema que no se puede soterrar por normativa. “Y las arquetas no se pueden proteger más, por lo que están expuestas a los profesionales del cobre que saben dónde y cuándo quitarlas”, indica.
Por otra parte, recuerda que tampoco se puede invertir en vigilantes jurados y que el seguro de la instalación ya no se hace cargo de los robos. “Lo más sensato era no reponerlo, pues, sin la seguridad de que vuelva a ser sustraído, sería dinero público malgastado”, manifiesta María Angustias Velasco, para matizar que se trata de una medida cautelar. “La idea es esperar un poco a que cesen los robos”.
Aunque la instalación es responsabilidad del Consorcio de la Vía Verde del Aceite, Velasco recuerda que otra cosa es su suministro eléctrico. “Tal y como se aprobó, esa responsabilidad es de los ayuntamientos”.