El régimen de Ucrania cede y pacta un anticipo electoral con la oposición
El acuerdo alcanzado entre el presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, y la oposición, con el respaldo de los manifestantes de la Plaza de la Independencia de Kiev, prevé la celebración de elecciones presidenciales antes de que acabe el año, la formación de un gobierno de unidad en menos de dos semanas y la realización de una investigación sobre la violencia.
Los firmantes del acuerdo, que también han suscrito los ministros de Exteriores de Alemania y Polonia, Frank-Walter Steinmeier y Radoslaw Sikorski, que han mediado para su consecución, aseguran haberlo alcanzado “preocupados por la trágica pérdida de vidas en Ucrania, buscando el fin inmediato del derramamiento de sangre y determinados a allanar el camino para una solución política de la crisis”.
El documento, que fue dado a conocer por el Ministerio de Exteriores alemán, establece que en el plazo de 48 horas tras la firma “se adoptará una ley especial que restaurará la Constitución de 2004, incluidas las enmiendas aprobadas hasta ahora”. Una vez esto ocurra, los firmantes se comprometen a que en el plazo de diez días crearán una coalición y formarán un gobierno de unidad nacional. “La reforma constitucional, que equilibra los poderes del presidente, el Gobierno y el Parlamento, comenzará inmediatamente y estará completada para septiembre”, precisa el documento. “Las elecciones presidenciales se celebrarán tan pronto como la nueva Constitución sea adoptada, pero no más tarde de diciembre de 2014”, estipula el acuerdo, en el que se precisa que se aprobará una nueva ley electoral y se creará una nueva Comisión Electoral Central “sobre la base de la proporcionalidad y de acuerdo con las normas de la OSCE”.
Por último, está prevista la realización de una “investigación sobre los recientes actos de violencia” bajo la supervisión de “las autoridades, la oposición y el Consejo de Europa”. El acuerdo ha sido rubricado por Yanukovich, y los tres principales líderes opositores: Vitali Klitschko, de UDAR; Oleh Tiahnibok, de Svoboda, y Arseni Yatseniuk, de Batkivshchyna. Como testigos figuran Steinmeier, Sikorski y el ministro de Exteriores francés, Laurent Fabius —aunque este se encuentra en Pekín— y Vladimir Lukin, el enviado especial del presidente ruso, Vladimir Putin.
El Parlamento votó también una amnistía para los implicados en la última oleada de violencia y a favor del cese del ministro del Interior en funciones, Vitali Zajárchenko. Además, por 310 votos a favor, se aprobó una ley que podría conducir a la liberación de Yulia Timoshenko, la ex primera ministra que cumple una pena de siete años de cárcel por extralimitarse en sus funciones al firmar en 2009 un gravoso contrato de importación de gas desde Rusia.
El Consejo del Maidán, un organismo del que están ausentes los representantes de los grupos más radicales, aprobó a regañadientes el acuerdo, después de que el ministro de Exteriores de Polonia, Radoslav Sikorski, planteara el dilema radical de apoyar o morir, según un vídeo grabado por la cadena de televisión ITV News. “Si no firman esto, tendrán un estado de excepción y el Ejército, y todos ustedes morirán”, dijo.
Esperanza europea. El presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, aseguró ayer que el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y la oposición en Ucrania ofrece “esperanza de que el país ha evitado lo peor”, aunque advertió de que el camino para reconstruir la confianza y la estabilidad no será fácil. “Doy la bienvenida al acuerdo aunque el camino para reconstruir la confianza no será fácil”, manifestó el presidente de la Eurocárama en un comunicado. “El acuerdo entre el Gobierno y la oposición en Ucrania ofrece esperanza de que el país ha evitado lo peor: la escalada de violencia y más muertes”, destacó el eurodiputado socialdemócrata alemán. Schulz dejó claro que “la violencia debe de parar inmediatamente”. “Se lo debemos a las víctimas de los enfrentamientos mortales, a los que ahora todos lloramos”, ha insistido, al tiempo que ha elogiado “los esfuerzos” de los ministros de Exteriores de Francia, Alemania y Polonia por “ayudar a mediar el acuerdo”. “La crisis debe terminar con un proceso político pacífico, que requerirá un compromiso serio de todos los lados, particularmente las autoridades, para formar un Gobierno incluyente, comenzar la reforma constitucional y organizar elecciones anticipadas”, concluyó en la nota