El rector reivindica el papel de la cata de aceites

y aseguró que los expertos en aceite de oliva de la Universidad de Jaén “somos los máximos defensores de la cata, para evaluar y valorar la cualidades organolécticas de los aceites de oliva”.
A su juicio, el día que ganen fuerza aquellos que piensan que los aceites no hay que evaluarlos, “tendremos muy poco futuro en el sector, porque envasaremos cosas que no son aceite de oliva. Parras confirmó que la cata es subjetiva, “claro, tan subjetiva como cuando se decidieron las medidas físico-químicas para medir los aceites”, pero consideró que cada vez existirá menos subjetividad y más coincidencia, “a medida de que la gente esté mejor formada”.
Para Parras, la cata de aceites de oliva es imprescindible para asegurar “que lo que ponemos en el etiquetado sea aceite de oliva virgen extra y no otra cosa”.
El rector de la UJA recordó que hace años decidieron que la institución universitaria jiennense debería ser un referente internacional en el campo de la formación de la olivicultura y que uno de los ejes era “la formación en cata”.