El PP aprueba en solitario la póliza para las nóminas
Bastó descender hasta la arena de la realidad económica del Ayuntamiento, con unas arcas municipales asediadas por los números rojos, para que las formas y la sintonía escenificada por los ediles de los cuatro grupos municipales se quebrara.
En el centro del debate estaba la operación de crédito a corto plazo que el equipo de Gobierno negocia desde mediados de junio con la Caja Rural para el pago de las nóminas de junio y julio de los trabajadores municipales. La medida —de la que el PP no informó a la oposición hasta el día anterior al pleno— no solo no cumple el principio de prudencia financiera. Excede en 22,1 millones de euros el límite legal permitido para la concertación de operaciones de tesorería, que, con esta nueva póliza por valor de 7,8 millones, ascendería a 48,5 millones.
En un demoledor informe, el interventor alerta de que la firma de este crédito podría derivar “en una causa de anulabilidad del acto administrativo”. Y, precisamente para evitar una posibilidad “que pondría en riesgo el pago de las nóminas”, la concejal de JeC, María Dolores Nieto, quiso saber, en una “pregunta expresa” dirigida “a los técnicos competentes y al presidente de la Corporación”, si en el expediente constaba el informe del secretario general del Tesoro y Política Financiera. “Si no es así, no se debería abordar este punto porque sería nulo de pleno derecho”, advirtió Nieto, que amenazó con abandonar el salón de plenos.
El edil de Hacienda replicó que el Tesoro se manifestaría una vez que la operación quedara aprobadas, y el alcalde desvió la atención: “Le pregunto si usted está de acuerdo en que cobren los trabajadores o no”. El ruido tomó el salón y los ediles de JeC pasaron a la acción y salieron en un gesto que reprobó la portavoz municipal de C’s. “Si la tónica va a ser salirse de los plenos, tendrían que replanteárselo. Nosotros estaremos a las buenas y a las malas por respeto al electorado”.