El poder de la política cercana

El mapa electoral de la provincia ya está cerrado. Con la constitución de los Ayuntamientos acaba el último paso para que los nuevos equipos de gobierne comiencen a marcar el rumbo político de los Ayuntamientos. El PSOE obtuvo 60 alcaldías, 53 por mayoría absoluta, por 25 del PP, con 17 absolutas. De esta forma, el socialismo vuelve a teñir de rojo el territorio y recobra un poder municipal que en las elecciones de 2011 perdió vigor, sobre todo en las grandes ciudades de la provincia. Izquierda Unida, con todo lo que llueve en el ámbito nacional, mantiene 7 alcaldías. Más significativo si cabe son las tres que logra un casi desaparecido Partido Andalucista y 2 para los partidos independientes que pierden poder, aunque se convierten en llave de gobierno en varios municipios. En este sentido, la cercanía personal en estas elecciones cobra gran importancia, de ahí que en determinadas poblaciones el voto cambie en función de los comicios. Así, municipios que votan al Parlamento Andaluz en clave socialista son capaces de otorgar el bastón de mando a un líder del PP, Izquierda Unida o PA. Los partidos emergentes, en la provincia, no obtienen ninguna alcaldía. Da la sensación que llegaron tarde y que sus estructuras están, de momento, muy ligadas al líder. De hecho, la iniciativa que tienen en el ámbito nacional no se traslada a los municipios. Lo que, sin duda, lograron es una regeneración democrática impuesta a los grandes partidos. Esa necesidad de pacto con terceros puede ser una tónica en los próximos años y quizá sea determinante para limpiar las estructuras del Estado. Una renovación necesaria y un consenso con el que se puede hacer también policía. El ordeno y mando sigue desfasado. 

    15 jun 2015 / 12:28 H.