El peso del trigo, el de la solidaridad
Quisiera dar a conocer y compartir mediante esta carta una de las costumbres más interesantes y curiosas de las que existen en Torredonjimeno: se trata del llamado desde hace tiempo “El peso del trigo”, que consiste en lo siguiente: una vez concluida el día 27 la fiesta religiosa en honor de los Santos Cosme y Damián (patronos de la localidad), la gente se acumula la Plaza de San Pedro, delante de la iglesia en la que se celebró la fiesta citada. Vienen varios miembros de la junta directiva de la cofradía con gran solemnidad y portando una romana de grandes dimensiones. Entre dos de los más robustos sujetan un palo transversal del que cuelgan la romana y empiezan a pesar, una a una, las personas que hicieron “promesa de pesarse” a lo largo del año cuando por alguna circunstancia se encomendaron a los citados santos.
Un secretario anota el nombre y la pesada. Pues bien, la promesa consiste en que el interesado llevará a la Casa de Hermandad el equivalente de su peso en trigo (hoy se da la opción de que aporte o transfiera el importe en metálico). Además de este curioso ingreso, varios miembros de la junta directiva se pasan tres días pidiendo limosna de casa en casa (y entregan un calendario con los Santos, aunque no se le dé dinero). Estos haberes se redistribuyen después entre pobres y necesitados de la localidad. La caridad, ante todo.
Un secretario anota el nombre y la pesada. Pues bien, la promesa consiste en que el interesado llevará a la Casa de Hermandad el equivalente de su peso en trigo (hoy se da la opción de que aporte o transfiera el importe en metálico). Además de este curioso ingreso, varios miembros de la junta directiva se pasan tres días pidiendo limosna de casa en casa (y entregan un calendario con los Santos, aunque no se le dé dinero). Estos haberes se redistribuyen después entre pobres y necesitados de la localidad. La caridad, ante todo.