El partido del morbo

Es el partido más esperado de la temporada, el duelo señalado con aspa antes, incluso, del sorteo del calendario. Y asoma con premura, apenas recién estrenada la Liga, y triple ración de morbo. Podría ser mayor la dosis, pero la ausencia de Jona —convocado con Honduras— dirige los focos hacia Servando, Juanma Espinosa y Fran Machado, los otros tres futbolistas que abandonaron el Real Jaén en el mercado de fichajes con destino hacia la Tacita de Plata. Está por comprobar el recibimiento de la grada, si se impone la amarga sensación del reencuentro con el antiguo amor que aparece de la mano con el guapo del barrio, o si, finalmente, impera la nostalgia y los signos de agradecimiento por los servicios prestados. Se intuye la división de opiniones, con aplausos o silbidos en función del protagonista.

30 ago 2014 / 08:10 H.


No conviene, eso sí, centralizar el duelo entre dos aspirantes al ascenso en ese triple reencuentro. El Real Jaén y el Cádiz CF, dos transatlánticos del grupo cuarto, han puesto en marcha el desafío de manera diferente. Si los amarillos derribaron el Betis B por la vía rápida, los blancos aguantaron de pie en la lona del Estadio Romero Cuerda gracias a los reflejos de Toni García. El debut ofreció razones para la esperanza, léase el gol tras quiebro torero de Álvaro Montero, aunque no sirvió para despejar las dudas de la pretemporada ni de la dolorosa eliminación en Copa ante el Torreperogil.  En un Real Jaén todavía en construcción y con más novedades en la plantilla —ver página siguiente—, José Jesús Aybar, técnico y mánager deportivo del club, cuenta ante el Cádiz con la misma baja del estreno. El interior linarense Santi Villa ha mejorado de la contractura muscular y realiza trabajo con el grupo, pero no llega en plenitud física a un partido en que no se descartan la presencia en el once de futbolistas como Brian o Pedrito, suplente y ausente en Villanueva de la Serena, de forma respectiva. Una vez más, el marcador final dependerá de la aportación de jugadores como Urko Arroyo, Paco Sutil o Álvaro Montero, tridente de lujo con el que hacer frente a un enemigo poderoso desprovisto de su pareja de especialistas del gol (Jona y Ayram Cabrera) y sin pulmón en la medular (Navarrete).
Precisamente, son estas bajas las que garantizan la presencia de Fran Machado en la punta de lanza y el pleno de los tres exjiennenses en la alineación titular del Cádiz, un histórico del fútbol español con el ascenso grabado en la piel y un estigma en forma de estadística desfavorable en la capital: solo cinco triunfos en 26 visitas. En la última de ellas, en 2013, el Real Jaén se impuso por dos a uno gracias al doblete del canterano Mario Martos. Esta noche, a eso de las diez y media, seguramente la euforia envuelva La Victoria de repetirse un marcador similar o se dispare el pesimismo con un escenario opuesto. Está asegurado el morbo, pero no el desenlace.