El olivar ya trabaja con la vista puesta en un mal año
Martos se dispone a afrontar el comienzo de la siguiente campaña de aceituna. Los fabricantes y cooperativistas ya preparan el que será un año “difícil” para la recolección.
Las esperanzas de una buena cosecha están perdidas desde hace tiempo. El colectivo en general piensa que se avecina una campaña parecida a la de hace dos años en la que no se cogerá “ni la mitad de kilogramos que el año anterior”. Así lo afirma el presidente de la Sociedad Cooperativa Agraria Andaluza San Amador, Eduardo Chamorro, una de las más que más cantidad de aceituna muelen a lo largo del año. Las sequías de este año y las altas temperaturas en la época de floración del olivo, son los principales motivos para el pesimismo del sector.
También la cantidad de toneladas que se recogieron el año pasado y la tardía conclusión de la campaña anterior influyen en la temporada que se presenta. En cuanto al comienzo del periodo de recolección la opinión también es unánime. Tanto los responsables de las fábricas y las cooperativas, como el colectivo de agricultores, coinciden en que la campaña empezará más tarde de lo habitual, ya que los agricultores no tendrán ninguna prisa, por el poco fruto previsto. La Cooperativa San Amador, no obstante, confirma que abrirá durante el mes de octubre para el fruto verde, con el objetivo de obtener un aceite de mayor calidad. Como afirma Chamorro esa campaña suele durar una semana, aunque este año tendrá que alargarse unos días por la poca cantidad de género.
Los fabricantes aseguran que la situación no es tan extrema como la de la campaña 2012/2013. “Este año habrá poca cosecha, pero los olivos se conservan mucho mejor que dos años atrás”, aseguran. El concejal de Agricultura y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Martos, Juan Erena, también coincide con la opinión de los aceiteros. “Tras mantener una serie de reuniones, hemos llegado a la conclusión de que se presenta una mala campaña”. Erena explicó que estos vaivenes son “normales” y que ante la campaña que hubo el año pasado, “se preveía” una baja cosecha. El delegado de Agricultura, Julio Millán, también quiso detallar que estos problemas no serían tan graves si en Martos apostara por los sistemas de regadío. “He hablado con agricultores que utilizan el regadío y me han asegurado que tendrán una cosecha normal”, aseguró.