El Obispado invita a leer la nueva encíclica del Papa
La primera encíclica escrita íntegramente por el Papa Francisco y la segunda en sus tres años de pontificado ha supuesto una revolución medioambiental. La publicación de “Laudato si” (“Alabado seas”, tomado del Cántico de las criaturas de San Francisco de Asís) es una invitación a la “conversión ecológica”. Un documento que, según el Obispado, hay que conocer de primera mano “a través de una lectura reposada”. Es lo que hizo ayer el vicario general, Francisco Juan Martínez Rojas, quien desgranó en una conferencia las 191 páginas divididas en seis capítulos del documento pontificio: “La novedad de la encíclica es que ofrece una perspectiva muy amplia de la llamada crisis ecológica, ya que el Papa Francisco nos dice que va mucho más allá, ya que hunde sus raíces en una crisis social y global”, explica el vicario, horas antes de pronunciar la conferencia en la Sacristía de la Catedral de Jaén.
Francisco Juan Martínez Rojas pidió a los asistentes tomar “la Tierra” como punto de referencia, como “la casa de todos”. Y, a partir de ahí, tomar conciencia de los graves retos que la ponen en peligro, como el cambio climático, la carencia de agua, las amenazas a la biodiversidad o la deuda ecológica contraída por los opulentos países del Norte por esquilmar los recursos naturales del Sur. Para Martínez Rojas, lo importante es redescubrir y aclarar el vínculo existente entre la persona y la Creación. Por ello, el conferenciante invitó a leer las ideas concretas que el Papa Francisco propone sobre lo que un católico “puede y debe” hacer en el campo de la ecología. Tal y como recordó el propio Obispado, la lectura de la encíclica hace latir varios interrogantes: ¿para qué pasamos por este mundo?, ¿para qué venimos a esta tierra? o ¿qué tipo de mundo queremos dejar a quienes nos sucedan?
Francisco Juan Martínez Rojas pidió a los asistentes tomar “la Tierra” como punto de referencia, como “la casa de todos”. Y, a partir de ahí, tomar conciencia de los graves retos que la ponen en peligro, como el cambio climático, la carencia de agua, las amenazas a la biodiversidad o la deuda ecológica contraída por los opulentos países del Norte por esquilmar los recursos naturales del Sur. Para Martínez Rojas, lo importante es redescubrir y aclarar el vínculo existente entre la persona y la Creación. Por ello, el conferenciante invitó a leer las ideas concretas que el Papa Francisco propone sobre lo que un católico “puede y debe” hacer en el campo de la ecología. Tal y como recordó el propio Obispado, la lectura de la encíclica hace latir varios interrogantes: ¿para qué pasamos por este mundo?, ¿para qué venimos a esta tierra? o ¿qué tipo de mundo queremos dejar a quienes nos sucedan?
