El mejor mayo para el empleo
El mes de mayo que acaba de terminar ha sido el mejor de la historia en términos de creación de empleo, desde que existe cómputo de registros en el año 1996. El avance es lento, pero el camino está trazado. Al menos, desde las tesis del Gobierno. Sin embargo, como se alerta desde algunas organizaciones sindicales, el reto está en convertir el aumento de los puestos de trabajo en una tendencia estructural y no algo estacional o coyuntural, como parece que sucede ahora, ya que gran parte de los empleos se generan en el sector servicios. No se puede obviar que la regeneración laboral ha sido generalizada en prácticamente todo el país, una buena noticia que en el caso de Jaén se materializa en un descenso del desempleo en 420 personas. La tarifa plana de cien euros para los autónomos ha tenido una repercusión inmediata de 68.000 nuevos contratos indefinidos en el ámbito del país, un positivo balance que es real y palpable, pero que hay que aplaudir en su justa medida, ya que se trata de una iniciativa que tiene fecha de caducidad.
Entre la tesis de la aceleración económica que sostiene el Ejecutivo y la estrategia propagandística que se critica desde el principal partido en la oposición, se puede ver un término medio objetivo de cierta recuperación que, desde luego, es aún demasiado incipiente. Sería una clara irresponsabilidad echar las campanas al vuelo ante el actual atisbo de mejoría económica. En el cómputo general de la región, la cifra de parados ha descendido en 14.082 personas, sí, pero las personas sin trabajo superan el millón, 1.037.698 en concreto, —4,5 millones en todo el país— un dato aún demasiado sangrante e inaceptable en sí mismo.