El gran aplauso de la Justicia a un funcionario modélico

La pequeña figura de Teodoro García Guijarro se engrandeció sobre la tarima de la sala de vistas de la Audiencia Provincial, la institución a la que lleva sirviendo de forma ininterrumpida casi 28 años. Este “funcionario ejemplar” y de “trayectoria inmaculada” levantó la vista un segundo. Miró a su alrededor y contempló el aplauso que la Justicia le estaba dedicando. Volvió a agachar su cabeza, mientras que jueces, fiscales, secretarios, abogados, procuradores y sus compañeros funcionarios le agradecían tantos años de dedicación al servicio público.

30 oct 2015 / 11:22 H.


Unos minutos antes, la máxima autoridad de la Justicia en Andalucía, el magistrado Lorenzo del Río, le imponía la Cruz de San Raimundo de Peñafort, una de las más altas condecoraciones que entrega el Ministerio de Justicia. Una distinción que, en el caso de Teodoro García Guijarro, tiene un especial valor, pues en muy pocas ocasiones se entregan a un funcionario. “Para mí es un orgullo recibir esta condecoración, que no hubiera conseguido sin la ayuda de todos mis compañeros. Para ellos y para todos los trabajadores públicos va esta cruz. Ellos, tanto como yo, se merecen estar en este lugar”, señaló, emocionado, en su discurso de agradecimiento.
Antes de que la cruz colgara sobre su pecho, el secretario de la Audiencia, Reyes Ansino, fue el encargado de pronunciar la “laudatio” de un funcionario con el que comparte destino “desde hace 27 años, 8 meses y 13 días”: “Una pena de reclusión mayor”, ironizó Reyes Ansino. Después, destacó “la preparación y el rigor profesional de un trabajador incansable”. “Eres un referente para todos y has sido una pieza fundamental para que nuestra Audiencia Provincial esté entre las mejores de España”, insistió.
La presidenta de este órgano judicial, Elena Arias-Salgado, también quiso alabar a Teodoro García, con el que compartió su primer destino en el Juzgado de Cazorla, allá por 1988. “Era el funcionario en quien más confiaba, por ser trabajador, por ser licenciado en Derecho y, sobre todo, por ser buena persona”, aclaró. A continuación, la máxima representante de la Justicia en la provincia aseguró que Teodoro García se ha ganado la consideración y el afecto de muchísimas personas por dispensarles el mismo trato que le gustaría para él, “de tolerancia y de respeto”.
El fiscal jefe, Carlos Rueda; la vicedecana del Colegio de Abogados, Carmen Vallejo, y el decano del Colegio de Procuradores, José Jiménez Cózar, se unieron al reconocimiento que la Justicia ha brindado “a un funcionario ejemplar”. Además de su valía profesional y de sus amplios conocimientos del funcionamiento de la Justicia, todos destacaron la labor docente ejercida por Teodoro García que, a lo largo de los últimos años, ha preparado a centenares de opositores hasta convertirse en trabajadores públicos.
El funcionario homenajeado dedicó parte de su discurso a repartir méritos entre sus familiares. Tuvo cariñosísimas palabras para su mujer, Fina: “Sin ti no sería el mismo”. También para sus padres, ya fallecidos, para sus hermanos y, sobre todo, para sus hijos, Alicia y Alejandro. Ella participó en el reconocimiento a su padre sentada en el estrado, ya que ha conseguido plaza como abogada fiscal. Por último, Teodoro García Guijarro no quiso pasar por alto un detalle que otros muchos esconderían. Presumió de sus orígenes, de la aldea de Los Anchos, en Santiago-Pontones, donde nació: “Es mi refugio y mi sosiego. Viva la Sierra de Segura”, aseguró, emocionado.