El Gobierno local de La Carolina rechaza reformar el centro social

La necesidad de invertir “con cabeza” cada euro municipal hace que el Ayuntamiento de La Carolina decida no embarcarse en un proyecto que no considera necesario. Se trata de la reforma del Centro de Servicios Sociales Comunitarios de La Carolina. En esta intervención está previsto invertir 424.250,42 euros. La Junta iba a hacer frente a doscientos mil euros, mientras que la Diputación y el Ayuntamiento aportaban cada una 112.125,21 euros.
El alcalde carolinense, Francisco Gallarín, decidió que la Administración que preside no participe en el proyecto por varios motivos, aunque una frase los resume todos: “La obra consiste en la construcción de siete despachos y un nuevo salón. No es una inversión productiva”. “Las actuales instalaciones están bien”, juzga el máximo responsable municipal carolinense. En una carta remitida a la Diputación, Gallarín escribe: “La situación económica de este Ayuntamiento hace muy difícil asumir el compromiso de financiación”. El Gobierno local también recuerda en su misiva que la intervención era fruto de un convenio de colaboración tripartito, suscrito el 9 de febrero de 2011, entre las administraciones local, provincial y autonómica y que el acuerdo dejaba claro que las obras tendrían que acabar el 31 de diciembre próximo. Ese es otro de los argumentos que la Alcaldía carolinense pone sobre la mesa, la imposibilidad de que la reforma concluya a tiempo. Fuentes de la Diputación aclaran que la obra se paraliza debido a la negativa del Ayuntamiento a cumplir el convenio de colaboración, al dejar claro la Administración local que no puede hacer frente al compromiso presupuestario adquirido. De ahí que ayer, en el Boletín Oficial de la Provincia, se hiciera público un anuncio que dejaba sin efecto la licitación del proyecto “Reforma del Centro de Servicios Sociales Comunitarios en La Carolina”.
Esta decisión implica que la Diputación Provincial devolverá a las empresas que habían pujado para ejecutar la obra sus propuestas, ya que se renuncia al contrato por “razones de interés público”. En la misma línea, el Ayuntamiento, según reza en su carta, “en aras del principio de lealtad institucional”, deja claro que avisa de su intención de no hacer frente al convenio tripartito para “no generar perjuicios a terceros”. Con el dinero que se ahorra el Gobierno local al no invertir en estas instalaciones, el alcalde anuncia que se harán frente a cuestiones “más perentorias” para el funcionamiento de la Administración local y la prestación de servicios al ciudadano.