El envenenamiento de gatos moviliza a unos residentes

Agonizando en mitad de las sombras nocturnas, asfixiados por los efectos del veneno. Así hallaron a una pareja de gatos los vecinos de la Urbanización Azahar la pasada noche del domingo al lunes. Una dramática estampa que movilizó a los “rescatadores” aunque poco pudieron hacer por los felinos. Y es que, a pesar de que fueron trasladados al veterinario, los animales llegaron cadáveres. Los gatos pertenecían a una comunidad formada por 16 felinos que es cuidada por los residentes de la zona, ayudados por la Asociación Animalista, Pacma. “Esta mañana [por ayer] hemos reclamado a la Policía Local la presencia del veterinario municipal para localizar más gatos y atenderlos, aunque la búsqueda ha sido infructuosa”, explica el presidente del colectivo proanimalista, Manuel Serrano, quien indicó que, por la noche, irían de nuevo a ver cuántos felinos acuden a la hora de la comida. Y es que, desde que hallaron a la pareja moribunda, los vecinos no han dado con sus compañeros de comunidad.

22 sep 2015 / 09:44 H.


El control de este grupo animal, que apareció hace un tiempo por la zona conocida como las casas de Juan León, ha unido a los vecinos, cuyo objetivo es evitar que sigan procreando, pero sin que sufran una muerte inmediata. “La colonia de gatos lleva más de dos años controlada, aunque la aplicación del Proyecto CES (Captura, Esterilización y Suelta) es más reciente”, explica Serrano. En este sentido, el representante indica que los felinos son castrados, pero se les alimenta hasta que mueren y desaparecen de manera natural sin reproducirse. “Esta práctica se lleva a cabo desde principio de este año y se hace de forma particular”, subraya Manuel Serrano, quien se lamenta del escaso interés por parte del Ayuntamiento. “Llegamos a enviar una carta en la que informamos de la iniciativa para paliar el problema, pero todavía estamos esperando una contestación. Nadie se ha puesto en contacto con nosotros”, manifiesta el presidente de Pacma.


Aunque el colectivo y los vecinos están a la espera del informe del veterinario, las sospechas indican que los gatos fueron envenenados con embutido. En este sentido, Serrano aclara que, de ser así, estarían ante un delito, tal y como indica el artículo 337 del código penal que entró en vigor el pasado 1 julio, referente al maltrato animal. De hecho, la pena contemplada es de prisión entre 6 y 18 meses. “Pacma y los encargados de la colonia denunciamos este suceso a la Policía Nacional para que se investigue y se condene a los responsables”, indica el presidente.


solares. Aunque Manuel Serrano no lo vincula directamente con certeza, la manera en la que el Ayuntamiento desbrozó el solar en el que se hallaban los felinos puede haberlos perjudicado. “Hay quien piensa que los gatos son como alimañas pero, todo lo contrario, pues precisamente son los que se las comen. Desconocemos cómo son los protocolos de limpieza de los solares, y según qué medidas tomen, puede repercutir en la repentina desaparición de estos animales”, apunta.