El discurso del Rey .-Basado en hechos reales

Por Nuria López Priego 
Érase una vez un aspirante a rey que-que-que-que no te-te-te-tenía voz. No le faltaban presencia, carácter y tampoco violencia, agresividad y, vez en cuando, un poco de ordinariez. También sabía perder los estribos, enrojecer de rabia e impotencia y ser un padre amoroso y un hombre disciplinado y coherente.

    03 feb 2011 / 11:02 H.

     Pero, desgraciadamente, era un he-he-heredero incapa-pa-pa-pacitado para hablar en pú-pú-público frente a un micrófono. Este candidato al trono era ta-ta-tartamudo. Y esto, aunque comience con un “érase una vez”, no es un cuento de los hermanos Grimm. Es la historia real de un rey verdadero, Jorge VI de Inglaterra, padre de su “graciosa Majestad”, la actual Isabel II. Un rey “tartaja” que superó sus “problemas de la voz” gracias a los particulares métodos de un doctor intrépido, atrevido y terriblemente peculiar. Y, ahora, su historia llega a la gran pantalla de la mano del cineasta Tom Hooper y del siempre elegante Colin Firth, que, después de conquistar al Sindicato de Actores de Hollywood, aspira al Oscar al Mejor actor por su impecable papel real. El discurso del rey no se reduce a un mero problema de tartamudez. Es el drama de un niño relegado y maltratado que creció acomplejado y con miedo a ser el protagonista de su propia vida. Así, se convirtió en un segundón, pero la Historia y una abdicación por amor –la de su hermano mayor– hicieron de él una “estrella”; el hombre que, paradójicamente, con su voz, llenó de esperanza a Inglaterra cuando el mundo se desmoronaba en la II Guerra Mundial. Es una de esas historias de superación que encantan en Hollywood –el Sindicato ya la ha premiado como Mejor Película–, pero, además, cuenta dos aditivos: por un lado, el incuestionable trabajo de interpretación de Colin Firth y, por otro, y más destacable aún que el primero, que profundiza en la vida “corriente” de un personaje del mundo lejano e inalcanzable de la realeza. Un hombre con –supuestamente– “sangre azul” y educado para gobernar y estar por encima del bien y el mal, que se humaniza gracias al majestuoso retrato que Hopper hace de él, al que debe doce nominaciones a los Oscar.

    El discurso del Rey
    Director: Tom Hooper
    Protagonistas: Geoffrey Rush, Colin Firth, Helena Bonham-Carter