El deporte une a las residencias escolares en una jornada única

Francisco Juan Torres / Santiago de la Espada
Santiago de la Espada albergó la jornada de los IX Encuentros Deportivos de Residencias Escolares de Andalucía, con hospitalidad y temperaturas frioleras, con la nieve de fondo, pero con el calor de todos cuantos pusieron su empeño, voluntad y esfuerzo para que el día fuera fructífero. Días previos de trabajo, desde la propia residencia escolar Mirasierra de Santiago-Pontones, pasando por la labor organizativa de Francis Plaza, gestor deportivo de la Asociación para el Desarrollo Rural de la Sierra de Segura y los servicios municipales del Ayuntamiento.

    20 ene 2012 / 11:52 H.


     La jornada comenzó de madrugada para los participantes de la residencia escolar Simeón Oliver, de Alcalá la Real y de La Granja, de Marmolejo. Desde más cerca llegaron los residentes de la Bellavista de Villanueva del Arzobispo y Valparaíso de Beas de Segura. Unos 250 niños reunidos en la participación de modalidades como  fútbol sala, voleibol, ajedrez, tenis de mesa y atletismo.  
    La mañana se inició con temperaturas muy bajas, que fueron subiendo sobre el medio día y que, en algunos casos, el esfuerzo físico, hizo olvidar a los participantes que se encontraban en las alturas de la Sierra de Segura. Cada uno a lo suyo y, tras las participaciones, conjuntamente con el público, conocieron otras actividades, para hacer de la jornada un día inolvidable. Sergio Rodríguez, alcalde de Orcera, vinculado al mundo de los bolos serranos durante muchos años, hizo una demostración del juego autóctono, explicó a los pequeños las dificultades de que la bola impacte en el mingo y aclaró todas las dudas de los que se acercaron a conocer más sobre este deporte. Otros como Manuel Serrano y Francisco Nieto, participaron en una demostración de tirolina. A techo cubierto, el cura del pueblo “don Jesús” ejerció de árbitro de ajedrez, junto con otros dos grandes aficionados, Javier Sánchez y Francisco Molina. Y llegó el momento de la entrega de trofeos, medallas y recuerdos para los ganadores, la subida al podium, donde los escolares no regatearon esfuerzos para corear los nombres de los mejores. El momento de la gloria, a cambio de muchos entrenamientos y jornadas diarias, lejos de sus familias, supuso algo más que el dicho que dice que lo más importante es participar. De los móviles que sonaban se escuchaban frases como: “Mamá he ganado la carrera, el viernes nos vemos en casa”. Angustias María Rodríguez, delegada de Educación, al son de la mejor anfitriona del convite, saludó durante la comida a todos los participantes, profesores, voluntarios y autoridades, mesa por mesa. La hora de reponer fuerzas llegó con patatas a lo pobre, chorizos, chuletas, un huevo frito, refresco y yogurt. Un menú igual para todos, para saciar el apetito de un día grande, de una jornada festiva fuera del centro, que en pleno calendario escolar, sirve de actividad de convivencia. Desde el hotel San Francisco de Santiago de la Espada, los escolares y acompañantes, iniciaron aún con luz del día, la vuelta desde el municipio segureño, la vuelta a casa, para muchos, su residencia, donde pasan mas tiempo al año, con alegría saboreando el triunfo, o con sueño, ante una jornada muy movida. No se descarta que algún día, se vuelva, con la celebración de la concentración andaluza. Allí estarán los mejores. Una apuesta por hacer de estos encuentros una motivación para los alumnos, unidos por un mismo techo escolar, la residencia.