El conflicto de las terrazas

Los hosteleros acusan directamente al Ayuntamiento de persecución y amenazan con una protesta frente a sus puertas para defender sus negocios y puestos de trabajo.  Por un lado no entienden por qué la Administración no les concede la autorización para las ampliaciones de los veladores, consideran, además, que el papeleo es excesivo y que existen solicitudes que están a la espera desde el mes de febrero. De igual forma, los que la solicitan por primera vez también encuentran impedimentos y retrasos injustificados. Esta es la opinión de un sector que se considera maltratado por sus gobernantes. Otra gota para colmar el vaso de su paciencia es la petición municipal de que los establecimientos tengan la obligación de guardar mesas y sillas dentro los bares y restaurantes. La manifestación está fijada para el próximo día 15, convocada por la asociación de hosteleros, Asostel. Al otro lado, el concejal de Urbanismo, mantiene que el Ayuntamiento no quiere causar perjuicio a los hosteleros, pero que estos deben cumplir las normas. Sostienen que es obligación municipal velar por el decoro, higiene y que la calle, en definitiva, no es trastero de ningún negocio privado. Se reconocen retrasos puntuales, pero no generalizados. Otra polémica en ciernes será la tramitación de Zona Acústicamente Saturada en el barrio de San Ildefonso para acabar con la contaminación sonora que denuncian los vecinos. De momento, el Ayuntamiento dice que no retirará licencias, pero se antoja difícil conjugar el ocio en la vía pública, con el descanso que exigen los vecinos. En ese aspecto se requiere mayor vigilancia pública y, sobre todo, educación cívica de quienes disfrutan en las terrazas de los establecimientos. 

    05 jul 2014 / 22:00 H.