El compromiso con Haití se mantiene vivo

Haití era, antes del 11 de enero de 2010, uno de los países más pobres del mundo. Tras ese día, se convirtió, además, en una zona devastada. Muchos fueron los que acudieron en un primer momento en respuesta a la llamada de auxilio pero, dos años más tarde, son menos los que permanecen. La provincia de Jaén, se hermanó en el dolor con los habitantes del país caribeño y ha mantenido su compromiso en este tiempo.
No en vano, el pasado mes de junio, la sociedad jiennense respondió ampliamente a la propuesta de Edad Dorada-Mensajeros de la Paz en Andalucía para participar en una gala benéfica que se celebró en Los Villares. El dinero recaudado se destinó a proyectos de ayuda en Haití y en el Salvador. En este sentido, la ONG Mensajeros de la Paz recuerda que trabaja en la zona desde el día siguiente del terremoto. Atiende las necesidades de niños, personas mayores y familias damnificadas. Sus proyectos, en estos 24 meses, son tan numerosos que 15.000 personas se benefician del trabajo realizado.
Explica que la ruina y desolación forman parte aún del paisaje de la capital y casi 500.000 personas viven en campamentos de desplazados. Más del 80% de la población no tiene acceso al agua potable, ni a la sanidad. Miles de haitianos sobreviven gracias a la ayuda de las ONGs.  
Por su parte, Cáritas considera que es necesario apostar por un plan de desarrollo a largo plazo en la zona. El objetivo es reducir la pobreza y para ello ha diseñado la campaña “Cáritas con Haití”. Este año quiere dar continuidad a la implantación del plan nacional de educación con la red salesiana, al programa de desarrollo rural y seguridad alimentaria e al proyecto para que la población acceda a los servicios básicos.
Este domingo en La Semana, un completo reportaje sobre Haití.