El colegio Doctor Fleming gana oxígeno, refugio, madera y alegría

Nuria Fernández/Jódar
La sociedad galduriense está invitada a participar en el octavo reto de Diario JAEN: reforestar Cerro Lengua, 'pelado' a causa de un incendio, el próximo día 23. Los alumnos del colegio Doctor Fleming se entrenaron ayer, con la plantación de diez nuevos árboles y arbustos en su patio.

    16 nov 2010 / 11:10 H.


    En torno a cien alumnos y algunos padres y maestros es la aportación del colegio de Doctor Fleming a la plantación del próximo 23 de noviembre. Los demás estudiantes continúan con la población de los terrenos que circundan su centro en los que ya dan sombra algunos sanos olmos. Los estudiantes ya están hechos a la idea de que sin ellos, la hora del recreo sería mucho menos divertida, sobre todo en junio, y el patio, más feo. Y lo que a ellos les gusta son los colores, por lo menos a los más peques, que eligieron sus palas rojas, verdes y azules para cavar y echar tierra a las especies que les tocó plantar y que, desde ayer, acompañan a sus viejos compañeros de juegos.
    Eligieron con mucho criterio dónde colocar cada especie. Así, los niños de Infantil se dirigieron hacia un macetero cercano a la puerta principal para plantar su romero, y que todo el mundo se de cuenta de su presencia al percibir su olor a primera hora de la mañana. Se turnaban las palas, las de juguete, que también servían para remover la tierra, y las de verdad, que pesaban un poco más pero eran igual de divertidas.
    Fueron ellos los que mostraron al director general de DIARIO JAEN S. A., Alejandro Mas, y al director de Diario JAEN, Juan Espejo, el precioso mural elaborado entre los niños de todos los cursos del colegio. “Oxígeno, refugio, madera, sabiduría, alimentos, alegría. El árbol da vida” se podía leer en la pared del recibidor. Cada curso realizó una presentación en la que se explicaba por qué son necesarios y entre todos, decoraron un precioso árbol que era una auténtica ciudad silvestre en el que campaban a sus anchas, caracoles, frutos y setas, entre otras muchas cosas más.
    “Los caracoles los pintamos nosotros”, reclamaban los del aula de cinco años B muy orgullosos de su trabajo, que en las últimas semana se han convertido en unos expertos en árboles. “¿Por qué queremos mucho a los árboles?” preguntaba su maestra, y respondían a coro: “¡Nos dan frutas, y madera, y muebles y sillas”. Así que ellos, decidieron ayudar a crecer al suyo propio, un pino piñonero que les acompañará, por lo menos, durante los seis años que les queda por estudiar en el centro educativo. Se montó tal fiesta durante la plantación, que más de uno metió el pie sin querer en los hoyos preparados para introducir las demás especies. Los alumnos de tres y cuatro años plantaron una encina, y los de primero de Primaria trabajaron juntos para sembrar un algarrobo y los de segundo A y segundo B una cornicabra que el año que viene por estas fechas, si la protegen bien del frío y le dan muchos mimos, lucirá unas bonitas hojas de color rojo. También se pusieron manos a la obra el teniente de alcalde de Jódar, Juan Ruiz Ráez; el director general de DIARIO JAEN, Alejandro Mas, y el director de Diario JAEN, Juan Espejo, que ya son muy diestros en el asunto.
    En los distintos ciclos de Primaria, los niños trabajan, a menudo, las características de la flora y estudian los beneficios que aportan las plantas y los árboles, para concianciarlos sobre la necesidad de preservarlos en la naturaleza tal y como están y favorecer su reimplantación en las zonas de las que muchos ya han desaparecido. Lo hacen de manera integrada, en distintas asignaturas, en las que analizan diversos aspectos.
    Tal y como explicó una de las maestras de segundo, Maribel Sánchez, de cara a la jornada de ayer, que se convirtió en toda una fiesta a los árboles, realizaron diversos ejercicios plásticos, como los murales del recibidor del centro, y escrito poesías sobre hojas de árboles elaboradas con cartulinas que decoran las aulas y los pasillos. También han aprovechado estos días para realizar lecturas sobre asuntos relacionados con la flora y la naturaleza en general. Además, han salido a pasear alrededor del centro para identificar los árboles que crecen en las inmediaciones.
    Los de tercero B estaban en medio de una clase de Lectura cuando tuvieron que bajar a plantar el lentisco y, la verdad, no les molestó demasiado, a pesar del frío. Los del A se hicieron cargo de un árbol que conocían más que bien: el acebuche, que crecerá muy cerca del matorral que ofrece frutos rojos amarillas en primavera. A los niños que son un año mayores les vino estupendamente el encuentro jardinero, que coincide con su temario de Conocimiento del Medio. “Estamos dando la fotosíntesis, la savia bruta, la savia elaborada, cómo fabrican el alimento los árboles y la reproducción”, explicaron. Además, son padrinos de los árboles que ya tenían en el colegio e incluso les han puesto nombres, tan divertidos como Dingamonja u Hojas doradas  a olmos, pinos arizónicos o chopos. “Guardamos una hoja de nuestros árboles y somos los encargados de cuidarlos”. Desde ayer, se les acumula el trabajo.