El "Ciudad de Jaén" más triste

El nombre de la ciudad de Jaén es noticia en España después de que una adolescente de 16 años se arrojara desde el balcón de su domicilio tras enviar mensajes a sus amigos en los que decía que no quería vivir más con la situación de acoso escolar que sufría. Un triste caso que ha hecho popular y famoso un centro de enseñanza dedicado a la ciudad de Jaén, que es la que le da nombre. Se encuentra en el madrileño barrio de Usera, concretamente, en la calle Madre Rosa Blanco, que fue una religiosa —fallecida el 28 de abril de 2008— que gestó el Colegio Ciudad de Jaén en 1975 como un proyecto de enseñanza para llevar la educación a los niños que viven en los barrios del extrarradio de Madrid. Después del colegio, vino el IES Ciudad de Jaén y, unos años antes de morir, la guardería San José de Calasanz.

28 may 2015 / 09:49 H.

Ni los profesores del instituto, ni los del colegio se atreven a ofrecer una causa rotunda que explique el motivo que hizo a la religiosa Rosa Blanco y a la comunidad educativa que gestó el colegio en 1975 dedicárselo a la ciudad de Jaén. Sin embargo, sí que tienen unas hipótesis que puede estar en el camino de lo cierto. Los docentes señalan que, en la década de los años setenta, había costumbre de llamar a los centros de enseñanza “Ciudad de...” y ponerle nombre de una urbe española y europea. De hecho, un poco más abajo está el colegio Ciudad de Córdoba —en Villaverde Bajo—, que es coetáneo al Ciudad de Jaén.
Sin embargo, que haya uno que se le dedique a otra ciudad andaluza tampoco resulta una explicación. Más bien parece que tiene que ver con la zona. Este distrito está enclavado en la Carretera de Andalucía y existen constantes alusiones en el callejero e, incluso, en los establecimientos comerciales a las provincias de esta comunidad. Además, tradicionalmente, se trata de una zona en la que buscaron vivienda muchos de los hombres y de las mujeres andaluzas que emigraron a Madrid en los años 60, 70 y 80, por lo que existen raíces culturales que guían el entorno y que pudieron dar nombre a este colegio.
Precisamente, una de las docentes del instituto confirmaba que sus padres vivían muy cerca del colegio —en el barrio de Usera— y eran cordobeses y afirmaba que tuvo vecinos de Jaén. Asimismo, se da una coincidencia más. La mayoría de los maestros y profesores interinos que acuden a trabajar al colegio o al instituto son de la provincia de Jaén, según explicaban los docentes. Esto puede tener una parte de casualidad y, también, que cuando tienen la oferta para ir a un centro u otro —si la persona es nacida en Jaén— opte por seleccionar el centro de enseñanza que lleva el nombre de su tierra —como superstición o señal de buenas vibraciones para el futuro—. No obstante, el colegio y el instituto Ciudad de Jaén se encuentran en dos parcelas contiguas. Uno está al lado del otro. Y defienden el nombre de esta tierra. De hecho, en su bandera incorporan el olivo y el colegio tienen un gran árbol aceitunero que preside el patio central que, además, simboliza la unión, la fortaleza y la paz.
Por desgracia, este hecho luctuoso, que ahora se investiga en los juzgados, ha sido el que los ha lanzado a la fama, aunque existen más colegios en España dedicados a la Ciudad de Jaén, al igual que a otros núcleos urbanos a los que se les ha querido rendir homenaje.