El caso de la mujer fallecida en Los Cañones fue un accidente
 La muerte de María Dolores E. C.,  de 37 años, parece que fue un fatal accidente. El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 4 de Jaén fue el que tomó declaración y abrió las diligencias, aunque las pruebas apuntan a que la mujer se despeñó trágicamente por el desfiladero de Los Cañones.
La muerte de María Dolores E. C.,  de 37 años, parece que fue un fatal accidente. El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 4 de Jaén fue el que tomó declaración y abrió las diligencias, aunque las pruebas apuntan a que la mujer se despeñó trágicamente por el desfiladero de Los Cañones.
  La muerte de María Dolores E. C.,  de 37 años, parece que fue un fatal accidente. El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 4 de Jaén fue el que tomó declaración y abrió las diligencias, aunque las pruebas apuntan a que la mujer se despeñó trágicamente por el desfiladero de Los Cañones.
La muerte de María Dolores E. C.,  de 37 años, parece que fue un fatal accidente. El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 4 de Jaén fue el que tomó declaración y abrió las diligencias, aunque las pruebas apuntan a que la mujer se despeñó trágicamente por el desfiladero de Los Cañones.La Guardia Civil no da el caso por cerrado, aunque policialmente parece que el fallecimiento que se produjo el pasado 26 de julio en el paraje de Los Cañones —una zona especialmente peligrosa que acumulaba quejas vecinales— fue accidental. Antonio Ch. G. fue detenido después de que un testigo presencial lo viera junto a la víctima minutos antes y, después, se percatara de que cogía su coche y se marchaba del lugar. 
Sin embargo, tras su arresto por parte de la patrulla de “hurones” de la Policía Nacional en la carretera del Puente de la Sierra y prestar declaración ante el magistrado Fernando Moral, quedó en libertad el pasado 27 de julio. Compareció frente al juez Fernando Moral por un presunto delito de omisión del deber de socorro. En el momento de ser apresado presentaba síntomas evidentes de que conducía bajo los efectos del alcohol. Según consta, dio positivo en la prueba del etilómetro. La autopsia no revela nada más que las lesiones propias de precipitarse desde cerca de 15 metros de altura cerca de la antigua piscifactoría de Los Cañones, al lado de la explanada del Bar La Trucha. Asimismo, fuentes judiciales consultadas aclaran que el hombre reconoció que había estado con la víctima, que la vio caer al vacío de forma fortuita y que se marchó porque se asustó. En un primer momento, María Dolores E. C. sobrevivió al percance. De hecho, los primeros agentes del Instituto Armado que llegaron al lugar constataron que todavía respiraba, aunque su estado era muy grave. Estaba inconsciente y presentaba golpes por todo el cuerpo. Los sanitarios del 061 lograron estabilizarla y trasladarla con urgencia hasta el Hospital Neurotraumatológico de Jaén. La mujer tenía la cabeza destrozada por el fuerte impacto. 
 Enrique Alonso / Jaén Más información, hoy en la edición impresa de Diario JAEN