“El casco antiguo es una asignatura pendiente”

—Asume la gerencia de una concejalía con mucho peso. ¿Cuáles son los frentes más prioritarios?
—Ahora mismo, lo más importante dentro de las competencias que voy a tener está la publicación y la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que será una cuestión de poquito tiempo. Cuando se proceda a la publicación vendrá el reto de ejecutar y desarrollar ese plan, de forma que se abran nuevas expectativas para la ciudad y se creen situaciones para un plan que, hasta ahora, venía estando obsoleto. También hay otros ámbitos, como el del casco antiguo. Considero que sigue siendo una asignatura pendiente y que hay que poner en valor. Así, está el proyecto de los Jardines Secretos con el fin de atraer a la gente a esta zona y deje de estar en la situación que muchas veces nos encontramos. Seguimos con las Inspecciones Técnicas de la Edificación (ITE), que la gente, de primeras, lo veía un poco gravoso y no sabía muy bien la finalidad. Pero se trata, en definitiva de tener un control sobre ellas, que estén en perfectas condiciones de habitabilidad y que no vayan a dar problemas en el futuro. También, estamos con los sancionadores para controlar las posibles infracciones y continuamos con la regulación de las viviendas en suelo urbanizable.

11 ago 2015 / 09:41 H.

 

—Aunque conozca la Gerencia por su anterior puesto, ¿le impone el volumen de trabajo que tendrá que asumir?
—Son muchas sensaciones las que se mezclan. La primera es que impone respeto. Pero, luego, al ser de la casa, conoces muchos temas y a los compañeros. En la Gerencia hay personas muy trabajadoras y muy válidas y creo que con su ayuda el reto es más asequible. Se trata de que un gerente, con independencia de conocer todo el trabajo que se realiza en las distintas áreas, también tiene la labor de estar codo con codo con los compañeros.

—¿Cuál es la “patata caliente” que le deja su antecesor?
—Es que de Manuel [Rodríguez] solo puedo tener buenas palabras. Creo que ha realizado una labor muy importante que ha abarcado muchísimo y le ha tocado vivir un momento especial con la elaboración del nuevo PGOU, por lo que no he tenido tiempo de ver flecos. Siempre hay cosas por hacer, situaciones nuevas que se van generando, cosas que mejorar, pero independientemente de eso, creo que la labor de Manuel ha sido muy positiva y válida.

—O sea, que seguirá su misma línea de trabajo.
—Yo intentaré llevar mi propia línea. La suya me parece muy válida y no creo que sea objeto de reproche ni de la que tenga que apartarme radicalmente. Lo que pasa es que cada uno tendrá su criterio y su forma de llevar esto.

—¿Mantiene que el PGOU entrará en vigor el otoño como dijo el concejal?
—Sí, calculamos que para finales de septiembre y principios de octubre. Las conversaciones en Sevilla con la delegación fueron muy bien. Quedan cuestiones mínimas que tanto el equipo redactor como los compañeros del área de Planeamiento están manos a la obra, a pesar de las vacaciones.

—Hay quien critica la dilatación en el tiempo de las correcciones.
—Es un tiempo normal, ya que se trata de un proyecto de una gran envergadura. Hay algunos matices y cosas mínimas que perfilar, pues se revisa muy bien y a fondo el documento desde Sevilla. Va con tantos filtros que pensamos que tiene muchos problemas cuando solo son pequeños matices aunque sean laboriosos. No me cabe la menor duda de que, en breve, estará totalmente subsanado.

—¿Cómo afrontará el problema del casco antiguo?
—Con trabajo, ilusión y ganas, teniendo en cuenta las dificultades económicas. Y sé que por parte de mi concejal, Javier [Márquez] hay especial interés e ilusión con esto.

—¿Tienen un reto marcado a corto plazo con el concejal?
—Son las premisas que he dicho anteriormente. Quizá lo más inmediato es que para septiembre u octubre esté el PGOU, pero una vez publicado y corregidas y subsanadas las deficiencias, habrá que ejecutarlo y desarrollarlo pero sin olvidar las demás áreas de la Gerencia de Urbanismo.