El calor dará una tregua con una bajada de temperaturas

Silvia Ruiz Díaz / Jaén
La provincia sufrirá un nuevo descenso brusco de temperaturas. Los termómetros de la capital pasarán de los treinta y cinco grados de hoy a los veintisiete del próximo martes. Eso sí, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activa, hasta las seis de la tarde, el nivel de alerta amarilla por el calor extremo.

    14 jun 2009 / 09:40 H.

    El verano se adelantó en la provincia. Los termómetros llegaron a marcar hasta cuarenta grados a media tarde y el fin de semana destacó por su calor sofocante. Sin embargo, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anuncia una nueva bajada brusca de las temperaturas y es que, en sólo dos días, los mercurios descenderán hasta ocho grados en la capital. Por lo tanto, si hoy se espera una media de treinta y cinco de máxima, el martes no superarán los veintisiete. Eso sí, según los datos aportados por la agencia habrá que tomar el abanico y darse un buen chapuzón para comenzar la época estival, ya que las temperaturas más altas subirán ligeramente a partir del próximo miércoles. En cuanto a las mínimas, se situarán entre los veinte y los veintidós grados.
    Por otro lado, la Aemet  mantuvo, ayer, el “riesgo importante” en Jaén y, de doce del mediodía a seis de la tarde, se encontró en alerta naranja. Los termómetros de numerosos municipios de las comarcas de Cazorla, Segura y el valle del Guadalquivir alcanzaron más de cuarenta grados. Del mismo modo, los vecinos de la capital, los montes, Sierra Morena y El Condado no tuvieron más remedio que soportar el bochorno típico de los meses de julio en algunos puntos. Los ciudadanos también estuvieron pendientes de otras de las advertencias de la Aemet, que señaló la posibilidad de chubascos dispersos y moderados, acompañados de tormentas en las sierras. Sin embargo, la agencia de meteorología establece, hoy, el nivel de alerta amarilla e informa que las temperaturas pueden llegar hasta los treinta y ocho grados  en muchos municipios. Además, Jaén fue, junto con Córdoba y Sevilla, la más calurosa de España. De hecho, se convirtieron en las provincias andaluzas con mayor riesgo, seguidas de Almería y Granada.