El boceto del Museo Íbero tomará forma en otoño
Siguiendo el ejemplo por el que se decantó el consejero de Cultura, Luciano Alonso, la secretaria general del ramo, María del Mar Alfaro, evitó dar una fecha para fijar la apertura del Museo de Arte Ibero. Convencida de que lo que debe de preocupar más es el contenido antes que la forma, la responsable andaluza sí que se atrevió a marcar el calendario con dos grandes cruces. La primera es la culminación de las obras, retomadas en noviembre de 2014 —tras estar paradas desde mediados de 2012—, para “finales de 2015 o, como mucho, a principios de 2016”. Unas ejecuciones que, según Alfaro, siguen un ritmo “normal”.

La otra fecha la acercó hasta el próximo otoño, que será cuando ya esté concluida la redacción del plan museológico definitivo. Un documento que marcará los otros cimientos, los que den un discurso al futuro proyecto. Precisamente, ayer, la representante andaluza presentó un “aperitivo” de lo que supondrá este trabajo. No en vano, Alfaro matizó que en estos días se encargará su redacción “definitiva”. Mientras, de forma “paralela”, trabajarán la consignación presupuestaria para el año 2016 de las dotaciones necesarias para la redacción del proyecto y la ejecución material.
Tras incidir reiteradamente en la complejidad de la elaboración del documento, la representante autonómica explicó su importancia. “Es un documento de planificación que, con carácter integrado y global, recoge las principales líneas, propuestas y contenido del futuro museo”, apuntó Alfaro, quien subrayó su singularidad. “Tiene un carácter de servicio administrativo de gestión diferenciada”, indicó. Una peculiaridad de la que gozan pocos museos en Andalucía, como el de Bellas Artes de Sevilla, y que implica que contará con un presupuesto autónomo y mejora en la gestión. Asimismo, tendrá una dirección, tres áreas básicas y una comisión técnica como órgano de carácter consultivo.
Adaptado a la última ampliación física del edificio, que pasó de 7.200 a los ya definitivos 11.400 metros cuadrados, el proyecto de musealización también contemplará los hallazgos de los últimos años. Entre estos descubrimientos se incluirá la necrópolis de Piquía en Arjona o los relacionados con la Batalla de Baécula.
Por su parte, el director general de Instituciones Museísticas, Acción Cultural y Promoción del Arte, Sebastián Rueda, destacó que la mayoría de las piezas serán trasladadas desde el Museo Provincial de Jaén —a unos 50 metros—, así como de otros fondos procedentes de museos de la comunidad andaluza. “La salida de los fondos se hará con el máximo rigor y garantía de seguimiento”, subrayó Rueda. Por otra parte, preguntado por los tiempos de creación del edificio, Rueda afirmó: “Lleva un ritmo que es adecuado para la magnitud del proyecto [desde su puesta en marcha], no es un tiempo exagerado, pues hay museos que han durado más tiempo. Hay que tener en cuenta que es una iniciativa de una gran envergadura”, dijo Sebastián Rueda, quien insistió en la prevalencia de la calidad ante la fijación de una fecha.
De manera más técnica, la jefa de Servicio de Museos, Auxiliadora Llamas, desgranó las claves de la importancia del pueblo ibero para justificar la apuesta monográfica del museo. “Pretende poner en valor una de las antiguas culturas autóctonas de mayor desarrollo en el sur y el Levante peninsular. Su vocación es subrayar los valores del ibero andaluz, una definición genérica que engloba a distintos pueblos como los turdetanos, los oretanos o los bastetanos que dejaron una amplia huella”, recordó Llamas. Asimismo, en cuanto al traslado de piezas de otros museos al nuevo, destacó: “Haremos una reordenación de fondos pero siempre con una conciencia de que nuestros museos no pierdan su entidad”.