El Ayuntamiento paga los 70.000 euros por el caso de la portería

Fue el 30 de octubre del año 2005 cuando una ráfaga de viento derribó una portería que no estaba sujeta al suelo en las entonces recién inauguradas pistas polideportivas de La Glorieta. El travesaño de hierro golpeó en la cabeza al pequeño Cristian Ortega Chica que, esa tarde, jugaba al fútbol con sus amigos. El niño falleció al día siguiente en el hospital, como consecuencia de las graves heridas sufridas en el fatal accidente.
En los más de cinco años transcurridos desde entonces, los familiares han luchado por que se haga justicia. Primero, en los tribunales; después, contra la burocracia del Ayuntamiento, encargado de hacer frente a las indemnizaciones, ya que era el propietario de la instalación donde se produjo el accidente.
En octubre, se alcanzó un principio de acuerdo, con el que se cerraba el expediente de responsabilidad patrimonial. La Administración local asumió su culpa y se comprometió a indemnizar a los padres y hermanos con 70.000 euros. A cambio, los familiares del menor retirarían las demandas judiciales interpuestas contra el Ayuntamiento en el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Sin embargo, la familia no recibió ni un céntimo, lo que hizo que la madre de Cristian estallara la pasada Navidad: “Estamos hartos de engaños”, dijo. ¿Por qué no llegó el dinero? Simplemente, porque el Ayuntamiento de Jaén no estaba al día en el pago de las primas con Mapfre, su aseguradora. Hace una semana, todo se solucionó y la compañía realizó una transferencia bancaria a las cuentas del padre y de la madre de Cristian por valor de 70.000 euros. Así lo confirmaron ayer a JAEN el concejal de Personal, José Manuel Colmenero, y el despacho de abogados Heredia Barragán, que ha representado a la progenitora de Cristian.
No obstante, el caso no ha terminado. La familia solo ha retirado la demanda en lo que a la responsabilidad del Ayuntamiento se refiere. Todavía está abierto contra “los demás intervinientes” en el accidente. Ahora será el Juzgado el que deba adoptar una decisión.