El arrepentido que acusa

El excontable de Nóos ha dibujado en el escrito al fiscal que investiga el caso el funcionamiento de la trama en la que está implicado el cuñado del Rey y en la que se pretende imputar a la hermana de este. La confesión de este nuevo arrepentido tendrá que ser refrendada ante el juez Castro que pretende incorporarla a la causa, pero ratificada, ya que esta versión contradice la ya ofrecida en sede judicial. El contable sostiene que la trama se basaba en una mala de sociedades particulares, con facturas falsas y contratos laborales irreales que generaban beneficios fiscales. De todo acusa directamente a Urdangarin y a su exsocio, Diego Torres. El escrito, por el contrario, no implica ni cita a la Infanta Cristina en la red fraudulenta. Con la confesión del contable se aclara aún más la mecánica por la que se conseguían inversiones “políticas” en conferencias y actos deportivos que lejos de ir a una organización sin ánimo de lucro iban a parar, presuntamente, a los bolsillos de los principales implicados. Tanto el abogado de Torres como el de Urdangarin se plantean presentar querellas por las acusaciones vertidas por el que fue contable de las empresas hasta el año 2008. Las continuas notas y agendas que se encontraron en su casa son fundamentales para rastrear el baile del dinero por distintos lugares del mundo. De hecho las ramificaciones llegan hasta Belice, entre otros paraísos fiscales. El cerco, por lo tanto, se estrecha para los acusados y, una vez cerrada la causa, será el momento de dictaminar la responsabilidad de cada cual. Se pondrá punto final así a uno de los casos de corrupción que más han condicionado la vida política de España en los últimos años.

    04 jul 2014 / 22:00 H.