El 15-M

Antonio Jiménez Monzón/Desde Cambil. Los partidarios de las manifestaciones de los indignados se extienden por el mundo, con el origen de acabar con la injusticia social. Es una evolución por la Paz, que el mundo está demandando con toda justicia, frente a las financieras y paraísos fiscales.

    22 may 2012 / 11:10 H.

    Para los gobernantes, su único Dios es el dinero y llegados al poder de la Administración, lo que hacen es solucionar sus problemas familiares. Esto es un acto de injusticia que los sistemas burgueses o capitalistas vienen imponiendo a la sociedad. Y es consentido por los encargados de la Administración y mandan a la Policía a palear, a los que se manifiestan por dicho reparto de equidad o reparto de lo económico social. Esta es la verdad de lo que ha pasado en las votaciones del 20-N. En vez de acabar con el injusto bipartidismo entre PSOE (denominado de izquierdas), y el PP, de derechas, que apoyan el aburguesamiento de la administración. Esperemos que triunfe la verdad que protagoniza el movimiento del 15-M contra el derrumbamiento del poder de las financieras y paraísos fiscales y esto que sucediera con la determinación de las urnas, sin ningún enfrentamiento o conflicto bélico. Y que fuera reconocido como un triunfo de la soberanía del pueblo reconocida en el primer artículo de la Constitución. Que ya es hora que se reconozca tal derecho. El ejercicio de la verdad es la fuerza de la razón.