Draghi pide acelerar la capitalización del fondo de rescate permanente

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha  pedido este lunes acelerar la capitalización del fondo de rescate  permanente de 500.000 millones de euros de la UE por si Francia  pierde en breve su máxima calificación crediticia (triple 'A'), lo  que pondría en riesgo la viabilidad del mecanismo de asistencia  financiera actual.

    19 dic 2011 / 17:48 H.

    Draghi ha dicho que le gustaría que Francia no perdiera la 'triple  A', pero ha restado importancia al impacto de esta posible  degradación sobre el propio país. En cambio, ha admitido que "las  consecuencias de que Francia pierda la 'triple A' para el fondo  europeo de estabilidad financiera" constituyen "una cuestión  importante". "Estamos trabajando  activamente en todos los posibles escenarios,  y no sólo en éste de Francia", ha explicado el presidente de BCE en  una comparecencia ante la Comisión de Asuntos Económicos de la  Eurocámara. El fondo temporal ha sido calificado como 'triple A' por  todas las agencias de 'rating', pero la degradación de Francia  arrastraría muy probablemente también al mecanismo. A su juicio, la "mejor respuesta" a este riesgo debe ser  "acelerar" la puesta en marcha del fondo de rescate permanente, el  denominado mecanismo europeo de estabilidad (MEDE). "Y la  recapitalización del MEDE también debería acelerarse", ha sostenido. Asimismo, el presidente del BCE ha resaltado que los líderes  europeos se han comprometido a revisar en marzo la dotación máxima de  500.000 millones de euros del fondo permanente. Los Veintisiete  también han acordado adelantar a julio de 2012, un año antes de lo  previsto, la entrada en funcionamiento del MEDE. A diferencia del actual mecanismo de rescate, que se basa  únicamente en las garantías aportadas por los Estados miembros, el  fondo permanente contará con capital desembolsado por valor de 80.000  millones, lo que le permitirá mantener con más facilidad la máxima  calificación crediticia. Draghi ha explicado que el BCE espera empezar a actuar como  "agente" del fondo de rescate temporal en enero. Pero ha vuelto a  rechazar que se dé licencia bancaria al mecanismo, lo que le  permitiría acceder a financiación de la autoridad monetaria, porque a  su juicio ello significaría vulnerar la prohibición de financiación  monetaria prevista en los Tratados.
    El presidente del BCE ha dicho que la valoración sobre la  actuación de las agencias de rating antes y durante la crisis "no  puede ser complaciente ni positiva" y ha defendido una regulación  "sólida y robusta" del sector para "reducir la volatilidad del  mercado, mejorar la calidad del proceso de rating y restaurar la  confianza del mercado". En este sentido, Draghi ha respaldado las propuestas de la  Comisión Europea y ha reclamado reducir la dependencia respecto a las  notas de las agencias. "No deberían sustituir a la obligación de las  instituciones financieras y otros inversores de llevar a cabo su  propia evaluación", ha dicho.