Dos nuevos accidentes en el fatal punto kilométrico 393 de la N-432

Cifras para reflexionar. Una víctima mortal, once heridos y cinco accidentes. Es la trágica estadística registrada entre el 5 de enero  y el cierre de esta edición en la curva situada a la altura del kilómetro 393 de la N-432. Todos los percances tienen como denominador común que se produjeron de noche y los vehículos que los originaron circulaban sentido Granada por este tramo.
Los dos últimos casos conocidos que engruesan la siniestralidad de la vía ocurrieron ayer, con menos de doce horas de diferencia. En torno a las siete y media de la mañana, el Vokswagen Golf conducido por Sergio C. S., un vecino de Santa Ana de veinticuatro años, salió de la vía por el margen derecho contra el talud situado en el margen de la carretera. Pese a los daños del turismo, el ocupante sufrió lesiones leves.
Por la tarde, en torno a las siete menos cuarto, volvieron a oírse las sirenas en Alcalá. El motivo, otra salida de vía justo en el mismo lugar. La protagonista, una furgoneta Volkswagen cuyos dos ocupantes, residentes en la provincia de Granada, están ilesos. El automóvil quedó, igualmente, destrozado.
La peligrosidad de este punto evidencia, de acuerdo con la opinión generalizada entre la ciudadanía, que aparte de la forma inadecuada de conducir, la carretera es crucial en la inaudita sucesión de accidentes. Además, la curva en cuestión se ubica en un lugar propenso a la formación de escarcha y placas de hielo.
La psicosis ante el estado de la N-432 es tal que muchos vecinos optan por tomar la A-403 (Alcalá la Real-Dehesas Viejas) y la autovía A-44 para dirigirse a Granada, pese a que la distancia en kilómetros resulta mayor. La población exige que se adopten medidas inmediatas para impedir nuevas tragedias como la ocurrida el pasado día 6, cuando falleció Nayua M. G.
cambios. La alcaldesa, Elena Víboras, explica que recientemente se han instalado en la zona dos nuevas señales, una de limitación de velocidad y otra de curva peligrosa. Asimismo, señala que el Ejecutivo central, que es la Administración competente en la    N-432, señalizará el lugar como punto peligroso. Añade que el Ayuntamiento insiste a diario ante la Subdelegación del Gobierno y diversas instancias del Ministerio de Fomento para que se acelere la reforma en el tramo comprendido entre Alcalá y el límite provincial. Víboras anuncia que a finales del presente mes expirará el plazo de presentación de alegaciones y que, a partir de entonces, podrá firmarse con la empresa Corsán-Corviam el contrato para el arreglo de los once kilómetros. Una vez comenzadas las obras, el Ayuntamiento instará a que se acometan con rapidez porque son “una prioridad real”.