Dos encapuchados armados roban en una caja de ahorros de Quesada

Había bastantes clientes en la oficina de Unicaja de Quesada ayer por la mañana. Eran aproximadamente las once y, en la cola, esperaban clientes que aprovechaban para hacer ingresos o retirar fondos. El pueblo está de fiestas y el horario de las entidades bancarias es más reducido. En plena actividad, dos hombres irrumpieron en la caja de ahorros. Iban, según los testigos, encapuchados, y armados con una navaja de grandes dimensiones y una pistola. De esta guisa, lograron amenazar a los empleados y a los que aguardaban su turno. Al parecer, se hicieron con unos cuatro mil euros de la oficina y con dinero que iba a entrar en caja, incluida la recaudación de dos días de un supermercado del municipio quesadeño.
El alcalde, Manuel Vallejo, explicó que los clientes fueron obligados a “tirarse al suelo”. Con sus rehenes reducidos, los ladrones accedieron a la caja fuerte, precisa el máximo responsable municipal, y sustrajeron, en sus palabras, “una importante cantidad de dinero que aún se desconoce”. Habían dado el golpe en cuestión de minutos y huyeron a toda prisa. En la calle, los esperaba un colaborador, al volante de un coche que tenía el motor encendido y las puertas abiertas. El vehículo, según las primeras pistas recogidas, había sido robado en Úbeda. Los atracadores, aparentemente, lo tenían todo previsto. La sucursal, a diferencia de otras del pueblo, está en plena travesía, en una zona de la carretera donde un espacio ancho permite aparcar en doble fila. Además, se marcharon en dirección a Pozo Alcón, para evitar los semáforos. La Guardia Civil, que ya había recibido el aviso, comenzó la operación de búsqueda.
Todas las patrullas del Cuerpo que había disponibles se distribuyeron por la comarca para tratar de localizar y capturar a los asaltantes y, para ello, se apostaron en los cruces y en las entradas a los caminos, además de adentrarse en zonas de difícil acceso para encontrarlos. Al cierre de esta edición, la Benemérita todavía no había capturado a los ladrones que se buscaban ya por toda la provincia jiennense.
Siete atracos a lo largo de 2010
Hasta en siete ocasiones se perpetraron robos en entidades bancarias en la provincia de Jaén a lo largo del pasado año. Los asaltos afectaron a oficinas de Bailén, Torredonjimeno, de la capital, en cinco ocasiones. En La Iruela, el octubre de 2009, se cometió el último hecho delictivo de este tipo, hasta ayer, en la comarca cazorleña. En aquella ocasión, sobre las diez y media de la mañana, en la que era la Caja de Jaén, actualmente Unicaja, un atracador, provisto de una navaja de grandes dimensiones, entró en la oficina y, tras atemorizar a sus empleadas, se hizo con la recaudación que había en efectivo. Las empleadas le explicaron que el cofre de seguridad tenía un mecanismo de apertura con retardo, lo que disuadió al ladrón, que huyó con una bolsa cargada de dinero, a pie por las calles del municipio serrano. Los hechos causaron gran alarma en el tranquilo pueblo.