Dos detenidos por robar miles de kilos de cable
La seis denuncias recibidas en la Comisaría en apenas mes y medio por robo de cableado de cobre en distintas zonas industriales de la capital habían puesto en alerta a la Policía Nacional. Además de llevarse miles de kilos de este valioso material, los ladrones habían causado daños en la instalación eléctrica valorados por Endesa en más de 80.000 euros. Y lo que es peor: se trata de delitos en los que los delincuentes se juegan la vida. Cualquier error puede ser el último, ya que tocar el cable equivocado conlleva una descarga de miles de voltios, con unas consecuencias fatales. Tras una laboriosa investigación, los agentes han conseguido poner las esposas a los dos presuntos autores de los robos. Se trata de dos vecinos de la capital, ambos con antecedentes por delitos contra el patrimonio. Fuentes policiales cercanas a la investigación confirman el arresto de Román R. M. y Juan M. M., a los que se les acusa de estar detrás de seis robos con fuerza registrados en distintas zonas de la ciudad, principalmente en los polígonos de Los Olivares y Parque Empresarial Nuevo Jaén.
Fue en esta zona industrial donde se registró el primero a mediados del pasado mes de agosto, cuando los ladrones reventaron un centro de transformación. Aquel día consiguieron un suculento botín de más de 500 kilos de cable de cobre, además de una barra de alta tensión. Durante todo el verano se han ido sucediendo las sustracciones, siempre con el mismo “modus operandi”: forzar la ventana del edificio que sirve como respiradero para la maquinaria, acceder al interior y sacar todo el material. Es una labor compleja y peligrosa. Hay que pelar los cables, es decir, separar el plástico del cobre y cargar la mercancía. Todo con rapidez para exponerse solo el tiempo justo a las miradas indiscretas. Además, normalmente, los robos se perpetran de noche, lo que complica mucho más el trabajo.
Los propios empresarios de Los Olivares ya habían advertido de los riesgos que acarrea este tipo de actividad delictiva y no solo para los ladrones. Y es que muchas de las instalaciones de alta tensión han quedado al descubierto, lo que supone un peligro añadido para cualquier persona que transite por estas zonas industriales.
En las sucesivas denuncias presentadas por Endesa en la Comisaría, se valora el daño causado por los últimos seis robos en más de 80.000 euros. Los dos detenidos son buscadores de chatarra que han cruzado la raya de la legalidad. No han sido los únicos arrestados en las últimas semanas por hechos similares. La Policía Local ya puso las esposas a dos vecinos de Torredelcampo, a los que acusaba de intentar robar el cableado de la rotonda dedicada al aceite de oliva, que está ubicada en la carretera de Córdoba. En junio, la Vía Verde se quedó completamente a oscuras debido a que los ladrones se llevaron buena parte de la instalación eléctrica.