Día Mundial de la Tierra
Desde Úbeda. Esta semana (por el 22 de abril) coincidiendo con el equinoccio de primavera se celebra el día mundial de la Tierra. Mala cosa cuando para concienciar se necesita instaurar efemérides y peor aún cuando al recordatorio en el calendario se deben añadir otros como: la hora del planeta, el día mundial del medio ambiente y el día del árbol por citar solo algunos.
Este día de la Tierra, celebrado desde hace 44 años, solo ha servido, hasta ahora, para alertar de la importancia de modificar, de inmediato, nuestra actitud irresponsable. Este planeta mágico, azul y verde que se mueve majestuosamente por el espacio alrededor del sol soporta a un morador que consume los recursos de la naturaleza casi el doble de rápido de lo que se requiere para reponerlos. Con la desgracia de que la mayor parte de los humanos que habitan en las zonas subdesarrolladas son los últimos en beneficiarse de la vorágine esquilmadora del planeta pero sí los primeros en sufrir las devastadoras consecuencias. Triste paradoja la del ser humano: culpable y víctima de la destrucción del planeta. Si no ponemos remedio quizás la única solución esté en el descubrimiento reciente de un planeta gemelo a 500 millones de años luz con condiciones parecidas a las de aquí y que puede ser habitable. Si las generaciones del futuro tuvieran que mudarse allí espero que vayan con la lección aprendida que año tras año se viene repitiendo con el día de la Tierra. Entre otras cosas porque ese planeta gemelo tiene un año mucho más corto que el nuestro: solo 130 días. Por lo que urge actuar más para tener que conmemorar menos.
Juan Manuel Chica Cruz