Día del Padre en crisis
Irene Bueno/Jaén
La crisis hace mella, también, en los regalos que los progenitores recibirán hoy con motivo del Día del Padre. Las campañas de publicidad, menos agresivas que en años anteriores, dan una buena idea de que los bolsillos no están ahora para afrontar gastos extraordinarios significativos.

La crisis hace mella, también, en los regalos que los progenitores recibirán hoy con motivo del Día del Padre. Las campañas de publicidad, menos agresivas que en años anteriores, dan una buena idea de que los bolsillos no están ahora para afrontar gastos extraordinarios significativos.
Para la mayoría de los padres, el mejor regalo que recibirá hoy será aquel que realicen sus hijos, con todo su cariño, en los colegios y guarderías. Sencillas manualidades que lucirán durante el resto del año en estanterías, mesas de noche o cocinas. Será el que más les ilusionará y, también, con toda probabilidad, el único, ya que la crisis no da tregua a las economías familiares para afrontar gastos extraordinarios de tipo alguno. En este sentido, las campañas publicitarias han sido, durante las semanas precedentes menos agresivas que en ocasiones anteriores.
De hecho, sólo algunas sugerencias dentro del área de las nuevas tecnologías, como son consolas con juegos de memoria, se suman a los obsequios clásicos centrados en colonias, corbatas y productos de higiene. Este año, en algunas pastelerías y confiterías de Jaén también se ha promocionado un pastel similar al que ya se vendía para el Día de los Enamorados con la inscripción “Feliz Día del Padre”. Para este producto se sustituye el rojo clásico de los pasteles de San Valentín por la crema, la nata y, sobre todo, el chocolate. El precio oscila según el peso de la tarta, pero los hay desde un tamaño, casi individual, hasta de familia numerosa. Los más baratos se pueden adquirir entre los seis y los diez euros.
Se trata de un detalle para endulzar una celebración que, en esta ocasión, se presenta un tanto descafeinada. Otros progenitores, los menos, serán agasajados con regalos que nada tienen que ver con los tiempos económicos que corren. En este sentido, una de las novedades que tienen un mayor “tirón” son los circuitos termales. En Jaén hay varias empresas que los ofrecen e incluyen masajes terapéuticos, bañeras de hidromasajes e, incluso, sauna privada con degustación de productos como el cava o los bombones. Las estilistas de la capital apuntan que también están, cada vez más demandados, los productos realizados con la belleza y el cuidado de la piel masculina, otra sugerencia para los que necesitan una opción de última hora.