Detenidos en Jaén por el millonario atraco a una joyería en Puerto Banús

Rafael Abolafia/Jaén
La Policía Nacional ha detenido a, al menos, cuatro personas en Jaén por su presunta relación con el atraco perpetrado en una joyería de Puerto Banús (Marbella) en el que consiguieron un botín de cuatro millones de euros en joyas. En la misma operación también ha sido arrestado Miguel Montes Neiro, el que fue considerado durante un tiempo el preso común más antiguo de España.La investigación, que está bajo secreto de sumario por orden del juez de Marbella que lleva el caso, está ya prácticamente concluida. Se ha desarrollado en varias provincias andaluzas, entre ellas, Málaga, Granada y Jaén.

    22 feb 2013 / 10:14 H.

    Las fuentes consultadas explican que, de momento, la operación policial se ha saldado con más de una docena de arrestos. Al menos cuatro se realizaron en la provincia jiennense, en la que, además, se efectuaron cuatro registros domiciliarios, concretamente en la capital y en Alcalá la Real. Al parecer, los agentes hallaron algunas de las joyas sustraídas en el atraco, tal y como confirman a Diario JAEN.El espectacular robo se produjo en el centro comercial que El Corte Inglés tiene en la lujosa zona de Puerto Banús (Marbella). Ocurrió el pasado domingo 18 de noviembre, cuando el establecimiento estaba cerrado al público. Sobre las cuatro de la tarde, tres delincuentes se presentaron en una de las puertas del recinto y simularon ser unos trabajadores que iban a hacer tareas de mantenimiento. De esta manera, lograron acceder al interior del inmueble. Una vez dentro del gran almacén desenfundaron sus armas —pistolas con silenciador— y redujeron, uno a uno, a los tres vigilantes de seguridad que custodiaban el centro. Inmovilizados los guardias, los ladrones se hicieron con las llaves de las diferentes vitrinas acorazadas de la zona de joyería —un lineal donde están ubicados siete puestos de venta—. En pocos minutos desvalijaron la mayoría de los anaqueles. Un botín de cuatro millones de euros, según dio a conocer la Policía. Tras hacerse con las alhajas, los delincuentes le arrebataron las llaves del coche a uno de los vigilantes, que lo había dejado aparcado en una de las puertas de servicio del edificio, de manera que bloqueaba la entrada. Utilizaron ese vehículo para darse a la fuga. Los seis trabajadores permanecieron maniatados durante más de dos horas hasta que, sobre las siete y media de la tarde, uno de ellos consiguió liberarse y dar la voz de alarma. Para evitar ser identificados, ya que accedieron al centro a cara descubierta, los delincuentes sustrajeron el disco duro con las grabaciones de las múltiples cámaras de seguridad del centro comercial. Sin embargo, los investigadores consiguieron imágenes de los tres ladrones gracias a las cámaras de seguridad de otras establecimientos cercanos al centro comercial. Más información en nuestra edición impresa