Desfile de candidatos por el PSOE
El más madrugador fue el secretario general del PSOE de Jaén. Manuel Fernández Palomino tuvo que esperar a que abrieran las puertas de la sede de la calle Hurtado para presentar oficialmente su candidatura a las elecciones primarias. Fue a las ocho y media de la mañana. Unas horas más tarde lo hizo Fernando Calahorro, todavía presidente de la agrupación municipal. Y la sorpresa llegó por la tarde. Cuando todos creían que la propuesta del sector crítico era un brindis al sol, Miguel Sola también hizo oficial su pretensión.
Tres candidatos se someterán al voto de la militancia el 19 de octubre. Puede que se celebren las elecciones primarias o todavía puede que no. Todo depende de los avales. Cada uno de ellos está obligado a recoger las firmas de, al menos, 130 militantes. Si más de uno lo consigue, habrá cita con las urnas. Si solo uno lo logra, se producirá la aclamación del candidato, que será elegido para representar al Partido Socialista en las elecciones municipales de mayo de 2015. Manuel Fernández Palomino tiene ya, incluso, una plataforma de apoyo en las redes sociales, en las que destacados militantes, algunos con cargo orgánico, mostraron públicamente su apoyo. “Estoy más ilusionado que nunca”, comenta. Ayer mismo se desplazó hasta el paraje de Los Cañones para escenificar que su intención es estar al lado de la ciudadanía para solucionar sus problemas.
Fernando Calahorro ve muchas dificultades en el actual proceso de primarias. “Sabía que era difícil y que todo está pensado para que salga la persona designada por el aparato”, dice. Se queja de que la militancia no pueda expresar libremente su opinión en las urnas con votaciones en secreto y que tenga que hacerlo mediante firmas en las que expresen sus datos. “La verdad es que tengo el síndrome de la clandestinidad”, apostilla.
Miguel Sola se mostró también ilusionado después de dar el paso. Sin embargo, fuentes cercanas a él aseguran que se mostró contrariado cuando, en la sede del partido, le negaron el acceso al censo de militantes que componen la agrupación local. Tanto él como Fernando Calahorro se sienten apartados de la logística del partido para poner en funcionamiento la maquinaria de recogida de avales. Este último tiene previsto la convocatoria de una reunión entre los tres aspirantes para tratar el asunto antes de que la polémica vaya por otros derroteros. Calahorro tiene intención, además, de presentar su dimisión, en los próximos días, como presidente. “Yo creo que la ejecutiva debería ser neutral en este proceso tan importante”, manifiesta.