Desfile castrense por distintas calles de la ciudad patrimonial
Más de medio centenar de componentes de un grupo de “amigos de la Legión” y antiguos miembros del cuerpo militar desfilaron por las calles de Úbeda con motivo de las fiestas en honor de la Virgen del Carmen del Campillo. La comitiva salió a las siete de la tarde desde el Hospital de Santiago y se dirigió, acompañada de su mascota, una cabra, hacia la Plaza de Vázquez de Molina. A su llegada deleitó al público con una interpretación de su conocido himno.
El acto estuvo encuadrado dentro de las fiestas de la Asociación Virgen del Carmen del Campillo, que se desarrollaron a lo largo del fin de semana. No obstante, a pesar de las altas temperaturas el desfile de legionarios tuvo una amplia participación por parte de la ciudadanía, que no quiso perderse la convocatoria. Posteriormente se dirigieron hacia las celebraciones marianas, mientras llevaban una cruz hasta la explanada del Hotel Hidalgo.
Las fiestas comenzaron el viernes con una recogida de alimentos, que se destinarán para Cáritas. Asimismo, el fin de semana incluyó diversas misas y actividades en honor de la Virgen del Carmen, que realizó también un recorrido procesional desde su capilla hasta la explanada del mencionado establecimiento hostelero, escoltada por una banda de cornetas y tambores. Las propuestas se complementaron, también con la colocación de diversos altares elaborados por los vecinos de la zona, un elemento que creó ambiente especial en las calles ubetenses.
De forma paralela se celebraron, también, las fiestas de convivencia del Residencial el Campillo. Los actos comenzaron el viernes con el discurso de la presidenta de la asociación de vecinos y el pregón de la concejal de Medio Ambiente, Natalia Pérez. Además se procedió a la coronación del rey y la reina de las fiestas de 2015 y a recibir las inscripciones para el concurso del próximo año. La noche se completó con la actuación del cuadro flamenco de Leles&Grupo y una verbena popular con diversos juegos populares para todas las edades. Por otro lado, hubo globoflexia, pintacaras, bailes y atracciones para que los más pequeños disfruten de la programación. El sábado fue el turno del concurso de minichefs, en el que padres e hijos, en equipo pusieron en práctica sus “habilidades culinarias”. Para paliar las temperaturas a lo largo del mediodía, hubo una fiesta de la espuma y una degustación de paella y sangría. De noche siguieron los juegos populares y el concurso de futbolín. Por su parte, el cantante ubetense Antonio Ródenas amenizó la fiesta.