Desempleo a contracorriente

El mes de agosto no ha sido bueno para el empleo. Así hay que entenderlo, al menos, si se tienen en cuenta las cifras generales registradas en las oficinas de los servicios públicos de empleo: 21.679 parados más en el mes de agosto en el país, el triple que en el mismo mes del año pasado, cuando subió en 8.700 personas. En la misma línea, en la región, 1.079 andaluces pasaron a engrosar la penosa lista, con lo que se alcanzan ya los 983.504 desempleados en Andalucía.

    03 sep 2015 / 09:36 H.


    Hasta ahí los números relativos a otras provincias, que se vuelven del revés en el caso de la jiennense, siempre a contracorriente. El antiguo INEM revela que poco más de trescientos cincuenta jiennenses han salido del registro de desempleados, una circunstancia que, en este caso, no está ligada de manera directa al olivar. Sin embargo, sí se encuentra una relación directa con la agricultura, ya que gran parte de las personas que tienen ahora un trabajo lo han hallado en campañas de recogida de la vid o de la manzana en otros lugares del país o, incluso, de fuera del ámbito nacional. La reflexión va ligada a los meses entre octubre a enero o febrero, cuando es la aceituna la gran tabla de salvación de la economía provincial. Más allá de la efímera satisfacción de comprobar que hay menos parados jiennenses, como sucede también en otras veinte provincias españolas este pasado agosto, hay que subrayar que la salida laboral no la han encontrado en su gran mayoría en su tierra, lo que lleva a la conocida conclusión de que es cada vez más necesaria una discriminación positiva hacia Jaén y sus gentes. Ni el Ejecutivo puede mirar hacia otro lado, ni los dirigentes locales, provinciales y regionales ser débiles en sus reivindicaciones. La sociedad jiennense demanda beligerancia.