Denuncias por inseguridad en la zona de la Estación de Autobuses

Las inmediaciones de la Estación de Autobuses se han convertido en espacios que no animan demasiado a caminar. Especialmente, a partir del anochecer. Al menos, eso es lo que opinan los residentes en esta zona, que aseguran que existen personas, asiduas de la Plaza de La Libertad, que no van, precisamente, para viajar en ningún autobús.
Los residentes subrayan que, desde hace algunas semanas, se ha intensificado la presencia de trabajadores temporeros que acuden a la capital o que hacen transbordo en esta para llegar a cualquier pueblo con el fin de encontrar un tajo en la recogida de la aceituna. Explican que, al amparo de esta mayor afluencia también se intensifica la presencia de otras personas cuyos objetivos son bien distintos.
Alertan de grupos muy numerosos cuyos integrantes proceden de Europa del Este que  tienen en esta plaza su “base de operaciones”. Según señalan los denunciantes, se les ve “ir y venir” en los autobuses interurbanos a municipios del entorno de la capital. Indican que se acercan a ellos para pedirles una moneda, pero que tienen sospechas de que también se dedican a “actuar al descuido”. También apuntan a otro tipo de habituales del entorno de la Estación de Autobuses, que no son necesariamente extranjeros, y que, con el pretexto de pedir fuego o de pedir una moneda para un supuesto billete de autobús, han llegado a amenazar con armas blancas a los viandantes. 
intranquilidad. En opinión de los residentes, el problema más grave al que se enfrentan es la sensación de sentirse amenazados e inseguros cada vez que salen a la calle. Señalan que se muestran a la defensiva cada vez que alguien desconocido se les acerca y que, incluso, siente temor cuando tienen que entrar en sus propios portales o en los pasajes de los bloques de la calle Navas de Tolosa, cuando cae la noche.
Por su parte, fuentes de la Policía Local reconocen que tienen conocimiento de que existe cierta inquietud entre los vecinos y los comerciantes de las calles próximas a la Estación de Autobuses, que se acrecienta en esta época del año. No obstante, destaca que este temor no está acompañado de un incremento real de la delincuencia ni de las denuncias que presentan los vecinos.
En este sentido, explican que en los últimos días, en los alrededores de la antigua Plaza Coca de la Piñera solo se ha registrado “algún hurto” y “amenazas” entre algunos viandantes. A este respecto, los residentes corroboran que, con cierta frecuencia, son testigos de peleas y agresiones, por diferentes motivos, entre usuarios de la Estación de Autobuses.