Denuncian un ataque a la casa del jefe de la Policía de Marmolejo
La familia del jefe de la Policía Local de Marmolejo está preocupada. Ayer, antes del amanecer, se despertaron por un fuerte olor. Era la consecuencia del lanzamiento de insecticida a la fachada y en la cochera de su vivienda. La Guardia Civil investiga el ataque, que no es el primero que se registra.
No eran ni las seis de la mañana de ayer, noche cerrada todavía, y la familia del jefe de la Policía Local de Marmolejo, Francisco González Flores, ya estaba sobresaltada y un tanto asustada. María José Fuentes, la esposa del cabo que está al frente del Cuerpo, notó un fuerte olor como a “azufre” y un ambiente muy pesado, tóxico. Al principio, no encontraba el origen del hedor y, poco a poco, su marido, su hermana, que reside en el domicilio, y los dos hijos del matrimonio, se fueron despertando por la peste. Pensaban que se trataba del accidente de una cuba hasta que, al bajar a la cochera, se dieron cuenta de que había líquido, el origen, como comprobaron, del tufo que se había colado por todos los rincones del inmueble. En la fachada, había más, la sustancia estaba impregnada en la pared.
La mujer del policía comprendió entonces, según sostiene, que no se trataba de un percance, era algo intencionado. “Solo ha caído en mi vivienda, además, por debajo de una puerta. No es una manguera de una cuba que se haya descontrolado, ha sido a propósito”, explica. Además, no es la primera vez que a esta familia le ocurre algo así. En una ocasión, la fachada de su hogar apareció pintada de negro; la limpiaron, relata, y la volvieron a manchar. “Mi marido es un profesional y va a continuar con su trabajo, pero espero que localicen a los que lo han hecho. No se lo merece”, asegura esta marmolejeña sobre el cabo de la Policía Local, Francisco González, con unos treinta años de servicio en el Ayuntamiento de Marmolejo. En este pueblo, al igual que la mujer con la que se casó, nació.
Para limpiar la sustancia empleada para el ataque, al parecer un veneno que se usa en labores agrícolas, como aclaró la afectada, fue necesario el trabajo de varios operarios municipales. La familia puso los hechos en conocimiento de la Guardia Civil, que ha abierto diligencias para aclarar lo sucedido, y al Ayuntamiento. No obstante, el alcalde, Bartolomé Soriano, eludió hacer declaraciones al respecto.
Lo sucedido en la casa del jefe de la Policía Local llega en la misma semana en la que en el municipio de la Campiña, de unos siete mil vecinos, fue hallado el cadáver de un hombre, de unos cuarenta años, fallecido, al parecer, al precipitarse al vacío desde el segundo piso de una vivienda en la que, supuestamente, entró a robar. La Policía Judicial de la Benemérita investiga los hechos. El hombre apareció muerto el pasado martes 13, de madrugada, en la calle Federico García Lorca, a la altura del número 16. Fue un testigo el que alertó a las Fuerzas del Orden y a los servicios sanitarios que no pudieron hacer más que certificar la defunción. La pista que apunta a la posibilidad de que el hombre, hallado sin vida por la Policía Local marmolejeña, hubiera cometido un robo es que, entre sus efectos, había cartillas de banco y objetos personales de la propietaria de la vivienda frente a la cual cayó al suelo. La Benemérita, que es la que se ha hecho cargo de las pesquisas, aclara que, por el momento, no hay explicación oficial de los hechos. En cuanto al cadáver, se le practicó la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Jaén.
José Rodríguez Cámara / Jaén